La carrera musical de Thomas Tallis se extendió durante los reinados de cuatro soberanos ingleses, Enrique VIII, Eduardo VI, María Tudor e Isabel I, escribiendo sin mayores problemas para ambas liturgias, maleabilidad que le ha garantizado la supervivencia como figura destacada de la música inglesa. A pesar de que Enrique VIII le asignó el puesto de organista de la Royal Chapel de Londres, pocas de sus piezas para teclado han llegado hasta nuestros días, siendo sobre todo conocido por su música coral sacra, tanto en latín como en inglés.
Spem in Alium, es posiblemente la obra más conocida de Thomas Tallis y se trata de un motete compuesto en 1573 presumiblemente para conmemorar el cuadragésimo aniversario de la reina Isabel I. Se trata de una composición a cuarenta voces, ocho coros a cinco voces, distribuidas por el espacio que generan el efecto estereofónico perseguido, de tal forma que el canto se sucede y superpone de uno a otro subcoro hasta alcanzar el último, donde comienza la misma serie en sentido opuesto. Coros tan poblados era algo poco frecuente en la época, pero no excepcional, pues existen obras anteriores y posteriores que usan estas o más voces, como las de Johannes Ockeghem -36 voces en Deo Gratias-, Biber - 54 voces en Missa Salisburgensis- o el que más se le relaciona con Tallis, Alessandro Striggio y su Ecce beatam lucem con 40 voces, entre otros.
Su letra dice así,
Spem in alium nunquam habui praeter in te
Deus Israel
qui irasceris
et propitius eris
et omnia peccata hominum in tribulatione dimittis
Domine Deus
Creator coeli et terrae
respice humilitatem nostram.
Nunca hemos puesto la esperanza en cualquier otro, pero si en ti,
Oh Dios de Israel
que puedes mostrar tanto la ira
y gracia,
y que absuelves todos los pecados del hombre, el sufrimiento
Señor Dios,
Creador del Cielo y de la Tierra
sé consciente de nuestra humillación.