Classical

Gnossienne nº 3. Erik Satie

Uno de los compositores más influyentes de la historia vivió en la pobreza más extrema.

A pesar de que fue difamado por los ortodoxos académicos por su gusto por el minimalismo, el serialismo, el impresionismo musical, y su dedicación al teatro del absurdo y a la composición e interpretación de música de cabaret, el compositor y pianista francés Erik Satie está considerado como uno de las figuras más influyentes de la música clásica.

Por tanto, este extraño personaje que durante un periodo de tiempo firmó bajo pseudónimo y dejaba escritas frases para interpretar sus obras como no estés orgulloso, abre la mente o suavemente, con intimidad, tenía que componer algo nuevo, inventado, como una Gnossienne, palabra que identifica a las seis maravillosas y únicas piezas que hizo bajo este nombre cuyo significado aún hoy día constituye un misterio repartido entre los que creen que está relacionado con Gnosis –conocimiento en griego- o Knossos -la ciudad de la antigua Creta–. Los Gnossiennes 1, 2 y 3 se publicaron 1893. Los tres Gnossiennes restantes los compuso entre 1891 y 1897, pero no fueron publicados hasta 1968.