El Airbus A319 es uno de los aviones más conocidos actualmente. Son muchas las compañías que cuentan con este modelo en su flota, cada una con una configuración particular, lo que explica el número variable de pasajeros que pueden viajar en él si tomamos una u otra aerolínea como referencia. Lo normal es que ronde las 124 plazas, una cifra que Emirates rebaja casi al 15% en un modelo que ha diseñado como si se tratara de un jet privado.
Pensado para acomodar a un máximo de 19 viajeros, el A319 de la compañía del Golfo Pérsico es mucho más que un servicio privado o un chárter al uso. En él se puede vivir la experiencia de viajar de un extremo a otro del globo con la sensación de que en ningún momento hemos abandonado un hotel de cinco estrellas Gran Lujo. Sobre todo si tenemos en cuenta sus muebles ergonómicos, las cómodas camas en cada una de las diez suites, el completísimo baño-spa decorado en tonos dorados y con piezas de mármol, los productos Bvlgari para acicalarse, las pantallas de 42 pulgadas en la sala de reuniones...
El comedor es un lounge con seis asientos individuales que permiten comer como si se tratara de un restaurante. Y como está pensado para reuniones de negocios, el salón se puede convertir en una gran barra de cátering para que los invitados disfruten de un cóctel informal con todo tipo de delicatessen al tiempo que los más adictos al trabajo consultan su correo o hacen alguna llamada, ya que no falta el Wi-Fi ni la conectividad dentro del aparato.
La próxima reunión de trabajo seguro que da menos pereza si se realiza a bordo de este avión. El destino es lo de menos...
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