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Simbiosis de luz y cristal en Habita, la vanguardia hotelera de México DF

El primer hotel de diseño contemporáneo de Ciudad de México, en la zona residencial de Polanco, es una oda a la arquitectura en vidrio.

Su forma evoca a un cubito de hielo hierático en el cruce de dos populosas calles del distrito de Polanco, la colonia de moda de Ciudad de México y la más vibrante en cuanto a cultura, ocio y negocios. Pero el trabajo de Enrique Norten y Bernardo Gómez Pimienta, los arquitectos tras el sello TEN, no ha culminado, para nada, en un espacio frío y desolador como puede ser un paisaje helado. Al contrario.

El hotel Habita es toda una oda al diseño arquitectónico de vanguardia, ensalzando la unión de un material como el vidrio y el juego de este con la luz natural, la misma que inunda cada rincón de este fabuloso hotel boutique de 36 habitaciones que presume de ser el primer establecimiento de la capital mexicana en la que el diseño contemporáneo es la clave. Y es que la remodelación del antiguo edificio de los años 50 en el que se ubica ha permitido dar una identidad única y sugerente a este rincón de la ciudad, especialmente al contrastarlo con las fachadas clásicas de los edificios vecinos.

Se trata de un hotel pequeño, que se centra en la atención diaria al detalle, permitiendo sentirnos cómodos si el viaje es, sobre todo, de negocios. No faltan opciones de ocio, como el bistró de cocina mexicana en la planta principal o la piscina con coctelería-bar en la azotea del edificio, con vistas sobre el resto de la colonia. Y hay que añadir un spa con gimnasio, sauna, salas de tratamientos y masajes, así como un jacuzzi.

La decoración tiende al minimalismo, con juego de luces provocado por las grandes cristaleras, y muros panelados en tonos blanco roto y difuminados que refuerzan la sensación de luminosidad, así como con lámparas de diseño de Artemide & Flos.

El arte es importante. El hotel cuenta con su propia librería, donde encontrar títulos de diseño, arquitectura, arte... y no faltan piezas únicas en cada rincón. Una oda cultural que es posible experimentar a partir de 160 €/noche.