Hoteles

Hotel Glaze, una cama de hielo en Canadá

Un hotel de hielo que se hace y deshace cada año.

Hay cuentos en los que una mujer se convierte en princesa y deja de serlo cuando el reloj da las 12 de la noche. Hay otras que se convierten en ellas cuando un príncipe le regala un beso. Y hay hoteles que se convierten en catedrales de hielo de la noche a la mañana y  desaparecen con los primeros rayos de sol. Así es. Un hotel que se hace y deshace cada año, que es solo habitable durante los meses del invierno.

En la estación Duchesnay, situada a 10 minutos del centro de la ciudad de Quebec, Canadá, se alza majestuoso el Hotel de Glace, conocido también como el Ice Hotel. Con más de 500 toneladas de hielo y 15.000 toneladas de nieve, alojarse en este hotel de hielo se convierte en una experiencia verdaderamente única.

La construcción comienza a principios de diciembre cuando la temperatura cae por debajo de cero. Durante un período de seis semanas, 50 personas trabajan sin descanso para construir el hotel. Unos 30 de los trabajadores se centran en la producción, mientras que 15 escultores se encargan de la decoración. Para darle forma, se utilizan moldes de metal sobre los que unos sopladores arrojan la nieve necesaria y se sostiene el hielo que conforman las esculturas. Una vez el material esté duro, los moldes se remueven y así es cómo nace el Hotel de Glace.

Dispone de 36 habitaciones y suites temáticas. Todas las camas tienen una base sólida de hielo y, sobre un somier de madera se colocan los colchones que están cubiertos con mantas y sacos diseñados para mantener el calor en temperaturas tan bajas como -30 ° C. La temperatura ambiente varía sólo unos grados entre -3 ° C y -5 ° C, independientemente de la temperatura exterior que haya. Para hacer la estancia todavía más especial, el hotel cuenta con una capilla para bodas, un increíble bar de hielo y la atracción más divertida, un tobogán de hielo gigante.

Alojarse en el hotel puede resultar algo difícil ya que está abierto durante solo tres meses (enero, febrero y marzo) y la demanda es muy elevada. Pero si alguna vez te encuentras en Quebec y quieres descubrir algo nuevo y diferente, aprovecha para visitar el hotel y sus esculturas y tomarte un ice coffee en este Ice Hotel.  Solo apto para los que no sufren con el frío...