235 metros de altura y vistas de 360 grados es el mayor atractivo de la Torre SyV de Madrid, una de las cuatro que corona el cielo de la capital en pleno norte del Paseo de la Castellana. Pero no el único, ya que hay que sumar un edificio funcional cuyas primeras 30 plantas corresponden a un cinco estrellas que se ha reivindicado, a pesar de su corta edad, como uno de los imprescindibles del lujo moderno de nuestro país.
El Eurostars Madrid Tower ha sabido capitalizar bien el increíble valor que suponen sus vistas privilegiadas, de ahí que pocos cambien una mesa para desayunar junto a las ventanas de la planta 30 o una cena, a la misma altura, en su restaurante gastronómico Volvoreta. Aunque quizás en este último habrá que dividirse: unos minutos mirar cómo se ilumina Madrid de noche, durante la cena, y la diversión culinaria de sus platos, especialmente si nos decidimos por un menú degustación. Huevo de corral a media cocción con panceta ibérica, anguila ahumada y consomé de patata; Lomo de lubina salvaje al vapor de algas con guiso de quina, wakame y mejillones o un carré de cordero asado con gratén cremoso de pata y mollejas salteadas al pistacho son sólo algunas de sus exquisiteces, todas regadas con grandes vinos. Déjese aconsejar, no faltarán variedades poco habituales de uva.
Y una relajante sauna, un circuito termal...
Pero las vistas no sólo se disfrutan comiendo o, plácidamente, desde la cama de sus espaciosas habitaciones. Sin duda, pocos hoteles pueden tutear al Eurostars en cuanto a espectacularidad del spa en ese sentido. Una relajante sauna o un circuito termal son otra cosa si se puede acompañar del atardecer en directo de Madrid, viendo cómo el sol se pone por el oeste.
Todas las habitaciones están equipadas con elementos domóticos inteligentes, independientemente de que se trate de una Doble Superior, la más básica, o la Suite Presidencial, la más majestuosa. A partir de 135 €, la promoción de fin de semana permite conocer de primera mano el hotel (235 € si se prefiere Junior Suite y acceso al spa incluido), así, de paso, podrá probar durante el desayuno los mejores huevos benedictinos de Madrid y, casi seguro, de España. ¡No se arrepentirá de pedirlos!
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