Elegido como el mejor resort de Estados Unidos, el Pelican Hill es mucho más que un cinco estrellas. Situado en la soleada California, es un espacio que mira al Pacífico con una sonrisa, la que da saber que tenemos todo el tiempo del mundo para disfrutar de su exquisito campo de golf, la mejor restauración, las comodidades más exclusivas y las vistas al relajante océano.
Con una arquitectura inspirada en la de las villas del norte de Italia, el complejo cuenta con 204 habitaciones (34 de ellas, suites de 152 metros cuadrados con camas King Size) y 128 villas que permiten a los huéspedes sentirse como en casa. En la decoración destacan los techos abovedados con vigas de madera tallada a mano, las chimeneas de piedra caliza italiana en cada habitación, el bar con encimera de granito, las sábanas italianas y detalles como la tetera y cafetera de diseño de la firma Grind & Brew.
En las villas, un conserje, un mayordomo y un chef personal están a disposición del huésped. Los baños, revestidos de mármol y el sistema de audio Bose es sólo un par de detalles. Además, cuentan con acceso a una Casa Club y a una piscina climatizada con hidromasaje.
El mayor reclamo es el campo de golf de 36 hoyos diseñado por Tom Fazio. En realidad se trata de dos campos de 18 hoyos unidos: el Ocean North y el Ocean South, con increíbles vistas desde prácticamente todos los hoyos. Cuenta con una academia dirigida por Glenn Deck y caddies profesionales. Para reponer fuerzas, nada como alguno de los cinco restaurantes del complejo.
Y todo a partir de 240 €/noche. ¿Vamos haciendo las maletas para pasar la Navidad en California? ¡Yo pongo el bronceador!
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