Vanessa Montfort recupera la voz literaria de María Lejárraga.

María Lejárraga (1874-1974) fue una de las grandes figuras femeninas de la II República española. Fue feminista y diputada del PSOE, luchó por los derechos de la mujer pero, y por encima de todo, se convirtió en la “negra” de su marido. No es que él la obligase ni que ella se sometiera voluntariamente a esta labor, sino que las circunstancias laborales de Lejárraga no le permitían firmar un solo textos como autora mientras fuera maestra.

Como no le quedó otra (el matrimonio vivía del sueldo de ella como docente), cedió la autoría de toda su obra —teatral, novelística, poética, libretística, traducciones— a Gregorio Martínez Sierra. Él, que pasó a la historia como director de escena y autor de numerosas obras de teatro y libretos para ballets y zarzuelas, no escribió una sola línea. No es que se haya descubierto hace poco. Al contrario, ya en vida de ambos, aquello era un secreto a voces. Para cuando lo quiso enmendar, al separase, ya era tarde. Incluso cuando Martínez Sierra murió, ella continuó firmando con sus apellidos (los de él). No es comprensible, pero así fue. De esta forma, su vertiente literaria, casi un centenar de obras, desapareció de la historia.

María Lejárraga nació en La Rioja en 1874. Hija de un médico rural, creció en una familia numerosa amante de la cultura. Fue la mayor de siete hermanos. A los 26 años se casó con Gregorio Martínez Sierra, a quien conocía desde la infancia. Estudió magisterio y ejerció como profesora. Era la docencia su otra gran vocación, aparte del teatro y la escritura.

Vanessa Montfort rescata la voz literaria de María Lejárraga para el ciclo Firmado en letra grande en el Teatro Valle-Inclán (Madrid). El proyecto recupera todas esas figuras que en el pasado enriquecieron e innovaron la escena española, pero fueron ignoradas posteriormente. Dirigida por Miguel Ángel Lamata, la obra se aproxima a la escritora riojana desde varios planos, siendo su firma, más bien la ausencia de ella, el eje de la trama. “Este es un tema determinante en su vida, que afecta a todos los planos del ser humano que fue, además de un tema controvertido, difícil de entender, incluso”, explica Monfort.

En la obra que cierra el ciclo, dramaturga y director nos descubren a la escritora que “fue capaz de mantener su nombre siempre oculto pero que sí dejó un esmerado rastro de cartas y una autobiografía, quizás, para que llegara hasta nuestros días. Esta obra ha seguido ese camino de baldosas amarillas para darle rostro, voz, sexo y nombre a María Lejárraga”.

Firmado Lejárraga [En letra grande]. Funciones: del 23 de abril al 5 de mayo de 2019. De martes a domingo a las 18:00 h. Encuentro con el equipo artístico: 25 de abril y 30 de abril.

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