Escena

Tres semanas ponen de nuevo a Madrid en Danza

19 espectáculos y 29 representaciones protagonizadas por reconocidas figuras del mundo de la danza en Madrid.

El pasado 18 de noviembre la Gala Nacho Duato inauguró la XXI edición del Festival Internacional Madrid en Danza. La primera dirigida íntegramente por Aída Gómez, que durante las próximas tres semanas presentará 19 espectáculos y 29 representaciones protagonizadas por reconocidas figuras del mundo de la danza. Como cada año, las nuevas promesas también disfrutan de una sólida acogida. Los Teatros del Canal, la Sala Cuarta Pared y el Teatro Real Coliseo de Carlos III son las sedes principales del festival, ya tradición de los otoños madrileños.

Tras el éxito de las primeras actuaciones, la segunda semana del festival cuenta con la presencia de la compañía israelí Batsheva Dance Co. y su espectáculo Last Work en los Teatros del Canal. Una apuesta contemporánea que explora la movilidad corporal como forma la de expresión más antigua de la humanidad. En este mismo escenario, los amantes de la danza tienen una cita con el coreógrafo catalán Cesc Gelabert y el escritor, pintor y director de escena francés Valère Novarina y la representación de Escrito en el aire. Un ritual en el que el bailarín danza la palabra, mientras el escritor dibuja el movimiento. También aquí tendrá lugar la segunda Gala Internacional del festival que acoge a destacadas figuras nacionales e internacionales representando varias de las mejores coreografías del mundo.

El estreno absoluto de la semana tendrá lugar en la Sala Cuarta Pared a cargo de 10&10 Danza. Una propuesta de danza contemporánea, Olvido de hilo blanco, idea original de Inés Narváez Arróspide y Mónica Runde. Romnia es la apuesta de la Compañía Belén Maya en el Centro Cultural Paco Rabal. Una reflexión en torno a la “gitanidad” y la feminidad a través de la fusión: sonidos negros y “jondura” no flamenca de la mujer gitana. Como broche final a esta segunda parte, el Ballet de Rafael Aguilar rinde homenaje al coreógrafo con dos de sus trabajos más emblemáticos: Rango, una adaptación de La casa de Bernarda Alba; y Bolero, una reinterpretación de la célebre pieza de Ravel que hermanó al maestro de la danza flamenca contemporánea con Maurice Béjart.

La tercera semana subirá al escenario a la Dance Company Theaterhaus Stuttgart con una monumental pieza de Marco Goecke — Nijinski— que narra la vida del bailarín más extraordinario del siglo XX. Un visionario que hizo vibrar a medio mundo con actuaciones —los papeles de payaso en Petrushka (Igor Stravinsky), de fantasma en el Spectre de la rose y de esclavo de oro en Scherezade— memorables y que provocó varios escándalos a causa de la sensualidad y alto grado de erotismo de algunas de sus coreografías. El lado flamenco correrá a cargo de la compañía de Concha Jareño en el Teatro de la Abadía e Israel Galván en los Teatros del Canal. Mientras que Larumbe Danza vuelve a lo contemporáneo con Ensueños del bosque. Un espectáculo poético y subyugante, que crece y crea una tridimensionalidad envolvente por la interacción de la danza, la escenografía y el arte visual. En el Teatro Real Coliseo Carlos III.

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