Su nombre lo tomaron de una novela de L.P. Hartley, aunque tal vez les llegara vía la película inglesa que se realizó sobre ella en 1970, dirigida por Joseph Losey, protagonizada por Julie Christie y Alan Bates y que proporcionó un Oscar a la mejor actriz de reparto a Margaret Leighton. En España se tituló “El Mensajero”. El libro empieza con una de esas citas únicas: “El pasado es un país extranjero, allí hacen las cosas de otra forma”.
The Go-Between es una de las grandes bandas australiana de todos los tiempos y con el paso de los años se han convertido en una referencia fundamental del indie rock. Bandas como Teenage Fanclub o Belle & Sebastian reconocen su influencia. El grupo se formó en Brisbane en 1977 de la mano de dos cantantes, guitarristas y compositores excepcionales como eran Robert Foster y Grant McLennan. Por la formación han pasado gran cantidad de músicos, en total dieciocho bajistas, baterías, guitarristas, teclistas... en fin, de todo. Pero el alma eran ellos, Foster y McLennan.
Sobre las personalidades, dispares y complejas de sus líderes, se construía la personal música de The Go-Betweens. A uno, Robert Foster, le gustaba dar una imagen de vividor, ligón empedernido y con una estudiada ambigüedad sexual. El otro, Grant McLennan, era tímido, romántico, con aire de intelectual. Ambos compartían una ideología progresista y de izquierdas que no ocultaban en sus canciones, las cuales mostraban un atractivo contraste de luces y sombras.
Su primer disco apareció en el mercado en febrero de 1982 y se titulaba “Send Me A Lullaby” y a él le siguieron unos cuantos álbumes excepcionales. Durante algún tiempo The Go-Betweens estuvieron muy cerca de alcanzar el éxito rotundo de, por ejemplo The Smiths. De hecho se trasladaron a Londres en un intento de lograr auparse a ese primer nivel, sin embargo jamás lo consiguieron y no pasaron de ser una banda de culto, con alguna entrada en las listas y unas ventas razonables, pero no millonarias. Tal vez por eso, en 1989 decidieron dejarlo temporalmente. Y así fue hasta su regreso una década más tarde, en 2000, para continuar su carrera, sin bajar el nivel, hasta 2006. Por el camino, Grant y McLennan grabaron varios discos en solitario francamente interesantes.
En junio de 1987, The Go-Between publicó su quinto Lp en estudio, “Tallulah”, con una formación de quinteto en el que estaban, además de sus líderes, dos chicas, Amanda Brown, violín, oboe, teclados, guitarra y voces, y Belinda “Lindy” Morrison en la batería y el bajista Robert Vickers. Un magnífico disco de pop, con suaves guitarras que creaban distintos y mágicos ambientes. Redondas composiciones entre las que destacaba “Right Here”, una de las mejores canciones en la historia del pop.
El videoclip, sencillo y sin pretensiones, y la canción nos dibujan una sonrisa en el alma. Así eran The Go-Between.
It rains for days
So you stay inside
And lock your door.
Crying all the time
Crying for ...
You don't know what for.
You say your're undone by his kiss,
But don't you think
That for once in your life
It should be like this?
Your hands are tired,
Your eyes are blue.
I'm keeping you right here.
Whatever I have is yours
And it's right here.
Climb aboard my pony
Now you've been thrown.
Get back in the saddle
And let it be known
That you're made of steel.
Don't you think that
For once in your life
He should be made to feel?
Your hands are tired,
Your eyes are blue.
I'm keeping you right here.
Whatever I have is yours
And it's right here.
I know you're 32
But you look 55.
You walk around
With your eyes wide open
But you're barely alive.
You say you've lost your touch
But don't you think
That for once in your life
He could walk without a crutch?
Your hands are tired,
Your eyes are blue.
I'm keeping you right here.
Whatever I have is yours
And it's right here.