Con un inquietante videoclip, mitad rito satánico, mitad justicia divina, la banda australiana The Jezabels anuncia la publicación de su nuevo álbum para el próximo 12 de febrero. Este disco será el tercer de su carrera, se titulará “Synthia” y ya ha levantado una gran expectación entre los seguidores del cuarteto por escuchar las nuevas canciones y comprobar que siguen siendo una de las formaciones más atractivas del panorama internacional.
El single de adelanto es “Pleasure Drive”, una canción sobre la vida y una especie de rito humano para buscar el placer y la extinción del dolor. El título es un término que se remonta al psicoanalista Sigmund Freud y al filósofo griego Epicuro que investigaron sobre un aspecto fundamental en la vida de los hombres, algo bastante complejo y difícil de explicar, como es su deseo de paz y la inmunidad ante el miedo.
El nuevo trabajo está muy influenciado por los teclados, sintetizadores y sonidos que ha ido probando y sacando en los últimos tiempos Heather Shannon, la teclista de The Jezabels. Junto a su atractivo habitual, el cuarteto australiano propone una mirada diferente, más recargada en ocasiones, pero siempre apoyándose en melodías muy accesibles, coros e instrumentaciones dulces y estribillos muy directos.
El videoclip de “Pleasure Drive” lo ha dirigido Max Hemmings y en él se entremezcla lo gótico, lo demoníaco, el baile y la música. La cantante de The Jezabels, Hayley Mary, se transforma en una especie de ángel de la venganza que canaliza su oscura magia a través de una coreografía muy setentera en un bar decadente en el que las mujeres despechadas discuten con sus parejas que las han engañado. Ellas pasan de estar poseídas a transmisoras de la posesión. Bonito.
Tras la publicación del disco, The Jezabels tenía previsto realizar una gira mundial que acaba de ser cancelada hasta nuevo aviso debido a problemas de salud de la teclista Heather Shannon y a la decisión del grupo de no seguir adelante sin la banda al completo. Hace tres años, Heather fue diagnosticada de un cáncer de ovario y a pesar de que ha sido capaz de mantener un ritmo de vida normal, le han recomendado que, sin demora, sea sometida a un tratamiento adicional que requiere permanezca en Sydney.
The Jezabels ha hecho pública una nota en la que señalan su frustración y su tristeza por la cancelación de la gira, ya que el nuevo disco significaba mucho para ellos y querían compartirlo con todo el mundo en directo. Seguro que dentro de muy poco volveremos a ver al grupo sobre los escenarios interpretando sus nuevas canciones.
I got a 66 baby,
And I’m born to rock,
I got a one track mind,
Just to get me off.
I got a 66 baby,
I don’t give a fuck.
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