Folk

En mayo, William Fitzsimmons actuará en Madrid y Barcelona

William Fitzsimmons viene a España a presentar su último álbum. Lo hará en Madrid y Barcelona.

El cantante, compositor y productor musical William Fitzsimmons publicó en septiembre del pasado año su álbum “Mission Bell”, una crónica del tumultuoso último periodo de su vida, particularmente tras la separación de su segunda esposa. Con ese disco bajo el brazo, Fitzsimmons se encuentra realizando una intensa gira mundial que, tras recorrer su país, le traerá a Europa a primeros de mayo y que pasará por Alemania, Holanda, Reino Unido, Francia, Italia, Suiza, Austria, República Checa, Polonia y… sí, esta vez también España. Actuará en Madrid y Barcelona los días 18 y 19 de mayo.

El músico nacido en Pittsburg, Pensilvania, en 1978, pero residente en Nashville (el lugar en el que habitan las canciones) dio su salto a la fama con la inclusión de dos canciones suyas en la serie de médicos “Anatomía De Grey”. Con una base de indie folk, William Fitzsimmons empezó a escribir canciones mientras trabajaba como terapeuta en un hospital mental. De hecho su música ha sido siempre una especie de terapia para los avatares de su propia vida y de lo que iba reflejando en las vivencias de los demás. Sus dos primeros discos, “Until When We Are Ghosts” y “Goodnight”, autoeditados en 2005 y 2006 respectivamente, mostraban ya a un músico con una capacidad narrativa y emocional deslumbrante. La crítica, desde entonces, nunca le ha vuelto la espalda.

Su último disco, “Mission Bell”, narra el difícil trámite de su separación matrimonial. La versión inicial del álbum se grabó originalmente en el estudio casero de Fitzsimmons en verano de 2017, pero posteriormente el músico abandonó el proyecto durante el transcurso de la ruptura y como resultado de la separación. En 2018, William viajó a Nashville, para comenzar a grabar el álbum desde el principio. Trabajando con el productor Adam Landry (Deer Tick, Los Lobos, K.D. Lang, Vanessa Carlton), Fitzsimmons dedicó un mes a reconstruir el disco perdido, con contribuciones de amigos, entre ellos Abby Gundersen y Rosie Thomas. El álbum resultante arroja once canciones en las que cuenta la historia de un matrimonio de una década destruido y, finalmente, reconstruido desde cero.

Comenta William Fitzsimmons: "Tener que abandonar la primera versión de este disco fue increíblemente extraño y algo que nunca antes había hecho. Pero era lo correcto. Esas grabaciones se hicieron un momento en que casi todos los involucrados, incluyéndome a mí mismo, vivían de manera deshonesta, egoísta y pobre, y estaba claro en los resultados. Cuando me vi obligado a ver la verdad de cómo las cosas se habían podrido dentro y alrededor de mí, borré cada nota y cada palabra. Mi querido amigo y gerente, Rishon, me conectó con el productor Adam Landry, y los dos juntos pasamos semanas y semanas dando vida a un proyecto que pensé que se había perdido para siempre. Cuando terminamos, sentí que había recuperado algo que me fue arrebatado y, como resultado, me siento terriblemente orgulloso de este trabajo".

En cuanto al sonido, "Mission Bell" es el primer álbum analógico grabado en cinta de magneto de William Fitzsimmons. Los sonidos son crudos, reales y tangibles. La sonoridad familiar de las guitarras acústicas está presente pero ahora se une generosamente con sintetizadores, guitarras eléctricas, loops de batería y violines. “Montar sobre cinta era algo nuevo y, sinceramente, bastante aterrador para mí. No se puede pensar nada de 'lo arreglaremos en la postproducción'. Lo que tocas es lo que escucharás en el disco. Pero hay una especialidad que se obtiene en una actuación cuando no tienes un paracaídas. O lo tocas como si te importara de verdad o no, y creo que eso se refleja de manera muy clara en las grabaciones".