Pop

El músico Erk firmó una de las canciones que más nos gustaron de 2019

El alemán Erk Wiemer interpreta esta pieza junto a su compatriota Diane Weigmann.

Hay gente a la les resulta muy sencillo hacer listas con lo mejor del año. Y además de todo, de series, de libros, de películas, de discos… Las encabezan, además, con el petulante titular de `lo mejor del año´ pero ¿realmente han escuchado todos, repito, todos los discos? ¿han visto todas las series o películas? ¿se han leído todos los libros? Pues no, ya lo decimos nosotros. Como mucho una minúscula parte de lo que se publica, edita o emite y con eso hacen una lista. Pero nunca dicen `su´lista. A otros nos produce rubor. Sabemos perfectamente que, en el mejor de los casos, no llegamos al 1% de los discos que se lanzan al mercado. Da igual si es con discográfica o autoeditados, en Europa, Estados Unidos o en las Chimbambas, de rock, de jazz o de flamenco. ¿y quienes somos nosotros para clasificar, numerar y ordenar `lo mejor de 2019´? Pues eso, nadie. Así que simplemente señalamos en esta sección de Loff.it lo que nos vamos encontrando por la vida que nos emociona. Como esta canción de Erk.

Erk Wiemer procede de Alemania y vive en Berlín. Es un músico que deambula por el territorio del pop, allí donde habitan desde el indie pop, el piano pop y el power pop, tres de los géneros en los que Erk se mueve muy a gusto, feliz. Y además lo hace muy bien. Sus canciones son sencillas (aparentemente sencillas), directas, sinceras, optimistas, coloridas. Canciones con estribillos fáciles de recordar y muy pegadizos (lo cual es un mérito y no un problema). Canciones con melodías dulces y adictivas, de esas que se enredan en la memoria, en el recuerdo, y que uno puede reconocer en cualquier momento o expresar (tampoco vamos a referirnos como cantar, que no todos lo hacen) en la ducha, en el coche, mientras se hace deporte.

Como él mismo dice: “Piano, bajo y batería. ¡No creo que realmente necesite ningún otro instrumento!”. Esto lo afirmó Erk cuando comenzó con la música allá por 2003. Desde entonces su sonido y su música ha evolucionado mucho, pero aún así sigue sonando sencilla. Este músico tiene una visión muy clara de todo. Cuando dijo por primera vez su nombre, Erk, a alguien interesado en lo que hacía, la respuesta fue “!Ese no es un nombre, es un sonido!”. De ahí Erk Wiemer una consecuencia suficiente. Si todos pensaban así, ¿por qué no poner una banda sonora a la persona que había detrás de ese nombre?. Dicho y hecho.

Erk nació en las llanuras del norte de Alemania, alejado de toda influencia, como emisoras de radio o salas de conciertos. Así que a los 8 años empezó a componer su propia música. En la familia Wiemer, todos los niños aprendían obligatoriamente piano y él no fue menos. Sin embargo, mientras que sus hermanos mayores tenían una banda de hard rock, Erk escuchaba a los Beatles y los Beach Boys. De ahí esa aparente simplicidad, la misma que empapa por completo su álbum de debut, “Far From The World” (2005), un disco lleno de sorpresas, arreglos y una cuidada producción.

En su último Lp, el tercero publicado tras “Tidbits” (2009) y lanzado con el título de “When Night Meets Day” el pasado 2019, se incluye la canción “Take My Time” en la que participa la extraordinaria cantante germana Diane Weigmann. Una canción sencilla y maravillosa. Una canción muy del estilo de Erk, Weimer Erk. Para nosotros, de lo mejor del 2019.