Cada vez que escucho a The Beautiful South me doy cuenta de lo mucho que me gustaba esta banda. Un grupo de pop inglés que se formó en 1988 por dos antiguos componentes de los divertidos y frescos The Housemartins, Paul Heaton y Dave Hemingway. Por el grupo pasaron varias vocalistas femeninas, Briana Corrigan, Alison Wheeler y, en esta ocasión, la deliciosa Jacqui Abbott.
La canción “Dream A Little Dream” fue escrita por Fabian Andre y Wilburn Schwandt, la música, y Gus Kahn, la letra. La primera grabación, registrada el 16 de febrero de 1931, pertenece a Ozzie Nelson y dos días más tarde también fue grabada por Wayne King y su orquesta, con Ernie Birchill como cantante. El crooner Frankie Laine la convirtió en éxito en 1950 y Doris Day siete años más tarde la interpretó en el tiempo lento que hoy en día es conocida. En 1968, el cuarteto neoyorquino Mamas & The Papas realizó la interpretación más popular y vendió más de un millón de copias del single.
También han hecho su versión y la han grabado entre otros Nat King Cole, Ella Fitzgerald, Louis Armstrong, Bing Crosby, Sylvie Vartan -en italiano como “Nostalgia”-, Michael Bublé, Diana Krall, Robbie Williams o el cantante de Peal Jam Eddie Vedder.
The Beautiful South lanzaron al mercado esta canción como un single en 1995 y posteriormente fue recogida en un par de recopilatorios “Carry On Up The Charts” y “Solid Bronze”. Está también incluida en la banda sonora de la película de Lawrence Kasdan “French Kiss”, incluso cantada en francés.
Stars shining bright above you
Night breezes seem to whisper "I love you"
Birds singing in the sycamore tree
Dream a little dream of me
Say "Night-ie night" and kiss me
Just hold me tight and tell me you'll miss me
While I'm alone and blue as can be
Dream a little dream of me
Stars fading but I linger on, dear
Still craving your kiss
I'm longing to linger till dawn, dear
Just saying this
Sweet dreams till sunbeams find you
Sweet dreams that leave all worries behind you
But in your dreams whatever they be
Dream a little dream of me.
Es una demostración de la pasión que sentía The Beautiful South por las buenas voces, su devoción por las armonías vocales bien hechas y su entrega por el pop sencillo pero de gran calidad.