Butch Young
Pop

Dime Store Jesus. Butch Young

El fascinante universo musical de un artesano del pop llamado Butch Young.

A veces caen en nuestras manos discos que en su primera y distraída escucha, mientras conduces, estás leyendo o realizando cualquier actividad,  no dejan una gran huella. Están bien, resultan agradables pero quizás no son un fogonazo o no tienen una de esas canciones que te obligan a girar la cabeza en dirección al reproductor… Bien, esos discos merecen tener siempre una nueva oportunidad porque a veces hay sorpresas. Algo de eso le ocurre al álbum “Mercury Man” de Butch Young. La primera vez es una simple toma de contacto, un entreabrir la puerta a un universo musical infinito al que se tiene acceso al aventurarse en esa segunda escucha tan recomendable. Con Butch Young y su disco, cada escucha es una nueva estación, un nuevo hallazgo, una misión espacial diferente.

Natural de Hoboken, Nueva Jersey, en cuanto tuvo la edad suficiente aprovechó para abandonar el hogar familiar y dirigirse a Nueva York y además intercambiar su apellido de origen siciliano por el de soltera de su madre. Inmerso en una frenética actividad musical, Butch Young, junto a su socio y amigo Nick Celeste, formó una banda de power pop en una onda muy similar a los actuales Fountains Of Wayne llamada In Color. Con un puñado de canciones propias y algunas versiones bien elegidas (lo que siempre da muchas pistas), como “Precious To Me” de Phil Seymour o “Porpoise Song” de The Monkees, consiguieron subirse a escenarios como el Maxwell de Hoboken o el China Club neoyorquino. Y justo entonces grabaron un Ep para el sello Questionmark Records, por lo que durante una temporada fueron compañeros de escudería de los afamados Dramarama.

Durante un tiempo Celeste anduvo bastante atareado con proyecto en solitario del productor y ex componente de The Bongos, Richard Barone, lo que aprovechó Young para marchar al oeste y aventurarse en nuevos ambientes musicales. No le fue mal, ya que allí contribuyó con su voz en un par de discos de Dramarama y allí, en Los Ángeles, trabajó con músicos como Richard Bosworth (The Knack), Chris Carter (Dramarama), Berton Averre (The Knack), el batería Phil Jones (Tom Petty), el bajista Rick Rosas (Neil Young), Edan Everly (hijo de Don Everly), John Easdale, Tom Mullaney y muchos ilustres más que se han ido sumando a esa lista a lo largo de los años. Butch se empapó de talento y de experiencia.

Butch Young nunca ha abandonado la música. Apoyándose en la filosofía del “hazlo tú mismo” (un espíritu muy punk ese del “Do It Yourself” –DIY-), Butch ha estado haciendo canciones y grabándolas de forma más o menos artesanal y casi secreta. Hata ahora, que acaba de lanzar “Mercury Man”, un disco autoeditado y grabado prácticamente en casa, con la colaboración de Matt Lee en la guitarra y el bajo y de una serie de músicos que han ido contribuyendo puntalmente a enriquecer sus composiciones. El producto final es un auténtico lujo. Power pop elegante y de un altísimo nivel, con momentos de pop onírico y barroco, detalladamente cuidados y trabajados, que recuerdan a las genialidades de Brian Wilson, de The Beach Boys. En otros cortes del disco hay reminiscencias de los Beatles (¡cómo no!), con estribillos mágicos, gráciles, pegadizos, atrevidos, coloristas, infinitos... Melodías agridulces, con variedad de tonos, alegres pero sin estridencias, retraídas pero sin melancolía, serenas pero optimistas… Hay canciones tan elaboradas y precisas que entre las notas se siente el espíritu de Jeff Lynne, el genio de la E.L.O.

Al sumergirse conscientemente en este disco de Butch Young, entramos en un espacio infinito de sensaciones y placeres, de armonías y notas, vibrantes escenas, guitarras eléctricas envolventes. Un viaje insospechado que nos lleva, como en la portada, a una galaxia lejana, similar a muchas otras, pero diferente y llena de vida. En cada escucha “Mercury Man” es un constante descubrimiento, una obra imprescindible que deja atónito y sorprendido. Aunque hace unos pocos años Butch Young había reunido varias canciones en una maqueta que distribuyó entre seguidores y fanáticos del género, este es su debut discográfico, que resulta ser una obra de mucho peso, que gana en cada escucha, muy recomendable y que nos presenta a un músico de extremada sensibilidad pop.

 

Dime Store Jesus
Is stifling his sneezes
Worn-out waitress
Addressed him with her
Blessings and her sins

I am, you might recall
Your lord and master
No one you´ll ever find
Could bless you better

Tent show revivals are
Thumping on their bibles
Gas station seekers
Arrive tohear him speak
And speak The Word

I am, you might recall
Your lord and master
The one you trust to tell
Just what´s the mater

Son
Only son
Only son

Dme Store Jesus
Tiem you leave us

I am the chosen one
Your lord and master

Sidewalk Caesar
Relieved of all his seizures
Render´s to Jesus
A dime and nothing more
To catch the bus

There goes, you might recall
Your lord and master
Dime Store Jesus
Has arrived to save us

Son
Only son
Only son.