Paul J Riley era un arquitecto galés dedicado a al diseño industrial que trabajaba para Vivienne Westwood al que su creatividad le empujo a tomar un día la decisión de emprender el camino de la música, su verdadera pasión. Partiendo de un lote de unas treinta maquetas, Riley grabó en 2012 su primer disco “Alba Pace” eligiendo entre cerca de setenta canciones que había ido escribiendo durante casi veinte años. Un formidable lote de canciones bien construidas, elegantemente tocadas y cantadas.
Al escuchar la voz de Paul se enciende en nuestra memoria una luz un remoto lugar en el que están almacenados cantautores como Al Stewart o un injustamente olvidado Clifford T Ward. Pero también hay lugar para reencontrarse con la originalidad de Paul Simon o la sinceridad de Neil Young o la clase de Edwin Collins o la carga emotiva de Lloyd Cole. La envoltura es simple pero cuidada, hasta el punto de acercarse a los estándares del cada día más apetecible Soft Rock o ese folk pop rock británico de los setenta que tan agradable sigue resultando. En el disco Paul está arropado por la detallista guitarra acústica de Chris Eaton y los delicados teclados de Paddy Milner. Todo muy mínimo y muy medido. Según transcurren los cortes del álbum “Alba Place”, se respira un ambiente muy natural y confortable y los músicos envueltos en su grabación transmiten ese momento de mágico encuentro que sin duda se produjo en el estudio.
En su bien elaborado disco “Alba Place”, Riley pone su mirada sobre las relaciones sinceras, las que se esfuerzan por encontrar su significado y su comprensión. Canciones con una gran carga melódica y lírica. Un ejemplo es el tema “Blue”, en donde estremece por su manera de rendirse “si pudiera vivir todo de nuevo, hay una cosa que me gustaría hacer, vivir mi vida a todo color junto a ti”. Suave melancolía, contenida emoción. Exquisito.
El videoclip de “After Rain” está dirigido por Douglas Thomson, alias Director Douglas, se filmó en Barcelona y muestra una divertida relación entre el propio cantante, Paul J Riley, y la modelo internacional Yaourou Konaté Lehrmann. La química entre los protagonistas es evidente y surgió de forma natural y progresiva, lo que convirtió el rodaje en una experiencia muy positiva. Además se produjeron numerosas anécdotas, como cuando se grabó la secuencia de las flores en las Ramblas y apareció un grupo de jóvenes turistas italianas convencidas de que Paul J Riley era una gran estrella de cine, aunque realmente esta era la primera vez que se situaba ante las cámaras. Evidentemente el rodaje se interrumpió para que Paul pudiera firmar autógrafos y fotografiarse con sus fieles seguidores. Si conociesen su música, seguro que se hacían fans. Es tan bueno este tipo...
You say it's always raining
Wondering when the sun will shine on you again
You say I'm not so easy
But I'm trying to find a better life for me and you
Baby don't you know that the sweetest flowers grow
After rain
You say my life is easy
And yours always seems to turn out wrong
You say "why don't you believe me? "
I'm just trying to make a better life for me and you
And baby don't you know that the sweetest flowers grow
After rain
And baby don't you your'e the sweetest flower here
Once again
(it rains!) After Rain, After Rain, After Rain
You said you'd always love me
And I, said I'd always stay
Isn't, it bitter-sweet and funny, funny, funny
How things nev-er seem, to turn out that way
Baby, don't you know that the sweetest flowers grow
After rain
And baby don't you know y
Ou're the sweetest flower here once again
And baby don't you know your'e the sunshine of my life
You're my friend! you're my friend.
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