Japonés para exigentes. No es asunto de cursos de idiomas si no de gastronomía, y cuando de cocina nipona se trata, Inari es todo un referente.
Después de siete años en General Pardiñas, en Madrid, Nacho Fernández ha dado el salto a La Moraleja y ha levantado un elegante templo a la buena materia prima hecha al momento con pinceladas de sabores de aquí y de allá.
"Nuestra cocina es japonesa fusión. Tenemos platos tradicionales como el sashimi, el sushi niguiri, los makis tradicionales, las tempuras, arroceso el sukiyaki, pero también mezclamos lo japonés con toques más españoles como el foie, unos makis especiales y nuestros famosos tartares", cuenta Nacho. Es bien sabido que tiene el tartar de atún más exquisito que se haya probado en mucho tiempo.
Lo mejor, que la cocina, el marco y el viaje por el mundo que propone Inari no se olvida de los precios contenidos y se presenta asequible para todos, más aún si se opta por su servicio de Delivery o Take Away.
Inari tiene charme, aunque no sea francés. Es innovación, calidad, frescura y elegancia. Una excelente inmersión en la vanguardia culinaria oriental sin olvidarnos de lo más nuestro.
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