Para desayunar, comer, tomar una copa.
Restaurantes

Es una cantina

Patrón Lunares, en Santa Catalina, es el lugar del que todo el mundo habla.

No es el Rey Midas pero lo parece. Todo lo que toca, o mejor dicho, idea, no lo convierte en oro, pero casi. Al menos, en los lugares de moda; es decir, aquellos en los que todo el mundo quiere comer, tomar una copa y dejarse ver. A Javier Bonet le corresponde gran parte del éxito de locales y conceptos culinarios y de ocio como HD y La Musa, en Madrid. Ahora, además, ha alcanzado un gran sueño: abrir en Palma de Mallorca, Patrón Lunares.

Nacido en la isla y nieto de Patrón Lunares -aquel pescador con carisma que tantos recuerdan-, este cocinero y asesor gastronómico siempre quiso rendir homenaje a su abuelo a través de una cantina; pero no cualquiera, sino una muy especial. Ya la tiene junto a otros dos socios, también de la isla, y ocupa un local único. En este novísimo espacio ha puesto su atención todo aquel que permanece atento a los lugares de moda. Será, sin duda, la dirección diez de la temporada estival.

Situado en el antiguo Montepío del Arrabal, un rincón ligado a la memoria del barrio de pescadores de Santa Catalina, acoge un singular y renovado concepto de la tradicional cantina. Se ha mantenido el espíritu del local, respetando elementos como la barra de azulejos, las vigas de madera, las columnas de hierro, la carpintería y el espectacular suelo ajedrezado de baldosa hidráulica.

La artesanía tradicional mallorquina también está presente. Véase la tela de llengos o las piezas de la original vajilla hecha a mano en una ollería de Pòrtol con más de 200 años de historia.

Sobre una gran estructura de madera se mezclan antigüedades y objetos relacionados con el mar, cedidos por pescadores ya retirados o por sus descendientes. Y aquí y allá, pinceladas del rojo, azul y blanco marineros.

Pero, ¿qué se toma en Patrón Lunares? Cocina sincera, según apunta su impulsor, y abierta a todos los mares, es decir, con protagonismo del pescado de aquí y de aguas más lejanas. Junto a ellos, carnes y verduras ecológicas. Se come y cena, pero también se desayuna y pica en cualquier momento.