Lo venimos diciendo desde hace tiempo, no hay una ciudad en la que sea más fácil comerse el mundo (literalmente) que en la capital británica; Londres es cosmopolita a rabiar también en lo gastronómico lo que, unido a la escueta tradición gastronómica británica, hace que su oferta en lo que a restaurantes se refiere crezca de temporada en temporada y se diversifique cada vez más (y eso a pesar del Brexit, claro que en Londres ganaron de largo quienes votaron en contra de tal decisión). Este verano ha llegado a la ciudad un nuevo restaurante (han llegado muchos, en realidad, pero uno ha llamado especialmente nuestra atención), se trata de Tish, un restaurante kosher de cocina internacional que ofrece platos típicos de la gastronomía judía.
Lo primero que te gustará de Tish es saber que tiene terraza pero cuando llegues al restaurante no sabrás si acomodarte en ella o en su interior porque su sala es encantadora y sus sillas terriblemente bellas y cómodas; a Tish puedes llegar a desayunar o a cualquier hora del día porque abren su cocina a las 7 de la mañana y no la cierran hasta bien entrada la noche; David S. Levin es el dueño de este sugerente establecimiento y su abuela, de judía de origen húngaro- la inspiradora de su carta; es verdad que el restaurante cuenta también con algunos platos de cocina internacional por aquello de satisfacer todos los gustos pero a Tish se va a comer como un judío, especialmente en el shabat (tanto en la cena del viernes como en la comida del sábado) y sabiendo que, además, cuenta con un menú para niños.
La carta del Tish, más allá de su menú de shabat, es francamente amplia porque no se limita a los platos típicos del desayuno, la comida o la cena sino que, siendo un restaurante con la cocina abierta todo el día, ofrece también un buen número de deliciosos snacks, su carta de vinos y cócteles es digna también de mención... y cata.
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