En los últimos años son muchos los proyectores que han apagado sus luces, salas en las que ha cesado el sonido de las palomitas y en las que ya no se escucha el murmullo que precede a los trailers. Pero también son numerosos los cines que han decidido reabrir sus puertas para convertirse en tiendas, restaurantes o museos. Eso sí, sin renunciar nunca a todas las historias que cuentan sus paredes y que aún hoy pueden sentirse; historias de cine, con finales felices y bandas sonoras inolvidables.
El cine Astoria abrió sus puertas en pleno Eixample barcelonés hace ya 80 años y, hace tres, se reconvirtió en un restaurante y sala lounge con una exquisita decoración burlesque que mantiene, como homenaje, su esencia y su historia.
En el Astoria Barcelona ahora se celebran eventos, se ofrecen conciertos, se toman cócteles y se degusta comida japonesa. Pero, para recuperar del todo el glamour de los grandes espectáculos, el espacio se ha rendido al cabaret y ofrece un nuevo show con cena los viernes y sábados, el Circus Cabaret.
Este espectáculo dura dos horas y es interpretado en directo por diez artistas que han trabajado en grandes musicales como Los Miserables, Bella y Bestia o Grease. Circus Cabaret es un auténtico viaje en el tiempo que empieza en el cabaret del Berlín de los años 40, continúa con el swing de Nueva Orleans de los 50 y termina con los musicales de Broadway de los años 80 y estilos más actuales.
Y, por supuesto, entre canción y canción, platos elaborados con productos de temporada llenos de propuestas exquisitas. Las luces, la iluminación, el vestuario, la decoración y la puesta en escena crean un ambiente único que han conseguido que el telón del Astoria se vuelva a abrir por todo lo alto. Porque en el Astoria se sueña, se disfruta y se aplaude.
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