Seaview House es una casa de inspiración escultórica que sorprende no solo por sus formas sino también por sus materiales, no tanto porque sean poco habituales en arquitectura sino porque se les da en esta casa un uso particular, muy artístico y escultórico y dando como resultado una casa creativa a rabiar, tan blanca y radiante, bella, espectacular e inolvidable como una novia.
Por ejemplo ¿qué tal si ponemos el vidrio en el suelo además de en las ventanas? el resultado tal vez no sea del todo bueno para gentes con vértigo pero para los demás es magnífico porque elevan las alturas de la vivienda y nos regala una maravillosa sensación de amplitud; ¿y si hacemos de la escalera una escultura de caracol en blanco y vidrio? ese es precisamente el resultado, una gran escultura en el corazón de la casa.
¿Más detalles de interés? a nosotros nos gusta la mesa en blanco con sus sillas de respaldo alto, una versión moderna y atractiva de la mesa de comedor a la que sólo le faltan los caballeros y ser redonda (¡o cuadrada!) en lugar de ovalada; líneas sinuosas aunque depuradas, amplias terrazas, piscina, escaleras exteriores de hormigón, magníficos ventanales de suelo a techo y una decoración rica aunque protagonizada por el color minimalista por excelencia, el blanco, de ahí que podamos decir que Seaview House es una casa blanca y radiante como una novia.
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