Arquitectura

Una casa de vacaciones en un antiguo pazo

Un pazo que antaño fue casa de labranza y ganadería es hoy una casa de vacaciones sin par.

Galicia es tierra de pazos, casas de piedra que salpican el paisaje y se integran en él como si fueran parte de su naturaleza; son viviendas que en sus días de vino y rosas eran también bodega e incluso establo y es que eran casas de campo ligadas a la agricultura y la ganadería especialmente en zonas en las que estas actividades eran de notable importancia como es el caso de Arzúa, lugar de Galicia famoso por sus quesos con Denominación de Origen Protegida. Y ahí nos vamos, a Arzúa, porque el estudio de arquitectura madrileño ARQUID ha recuperado uno esos pazos rurales convirtiéndolo en una casa de verano de lujo.

Este antiguo pazo había caído en desuso y olvido con lo que eso supone siempre para una vivivienda, cuando se planificó su restauración se hizo con la idea de mantener la esencia histórica de este lugar representada por su estructura de piedra y la autenticidad de sus espacios pero hacerlo al tiempo convirtiendo lo que eran la casa y el establo en una residencia vacacional moderna y confortable para sus dueños.

Se conservaron los muros de piedra y los materiales utilizados en la reconstrucción fueron esencialmente madera de roble, acero y hormigón (hormigón que después se pulía y pintaba en color claro para que se integrase de forma armónica con el resto de la casa).

La vivienda es amplia, cuenta con cuatro habitaciones, tres baños y un aseo pero además conserva espacios y detalles esenciales en un pazo como este: la chimenea, la escalera de caracol que da acceso a la planta superior y por supuesto la lareira que no sólo permite calentar la casa (además del suelo radiante que ha sido instalado) sino que también anima recuperar las constumbres de antaño de sentarse junto al fuego, junto a la lareira, para contar cuentos de brujas... y asar castañas o hacer chocolate a la taza y café de puchero.

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Localización: Arzúa, A Coruña

Proyecto de Arquitectura, Paisajismo e Instalaciones: Estudio de arquitectura Arquid 
Constructor: Dinu Construcciones
Carpinteria: Cerrajería Villar 

Iluminación: Fontini, modelo Garby

Fotografía: Héctor Santos-Díez