Arquitectura

Un coqueto refugio de montaña para alpinistas hedonistas

Un refugio de diseño para los alpinistas más atrevidos y exigentes. El lujo estético en otra forma de vivir la montaña.

En una primera impresión podría parecer que estas casitas están puestas en este paisaje de postal al tún tún, sin ton ni son. Pero lo cierto es que estas casitas constituyen un moderno y coqueto refugio para alpinistas y su colocación responde a unos criterios arquitectónicos que mucho tienen que ver con el entorno natural en el que se encuentra, en la montaña de Skuta, en Eslovenia.

Cada vez son más los escaladores que acuden a la montaña de Skuta, en Eslovenia y como respuesta la necesidad humana básica de refugiarse nace este proyecto del estudio de arquitectura OFIS Architects en colaboración con la universidad de Harvard. Así, un grupo de trece estudiantes esbozaron un proyecto de diseño para crear un refugio innovador y práctico con la dificultad añadida de soportar condiciones climáticas extremas, cambios radicales de temperatura y desprendimiento de terreno.

El edificio se compone de tres módulos prefabricados que van en progresión, de menor a mayor altura, que fueron transportados en un día por helicóptero. Estos paneles son de hormigón con fibra de vidrio y cuentan con unas vistas imponentes sobre Skuta gracias a las inmensas ventanas que van del suelo al techo. Estas gozan de triple acristalamiento diseñadas para soportar las tremendas cargas de viento y nieve a la que se expone esta zona.

El interior, de madera natural, cumple con los requisitos estéticos del hábitat rural exterior y crea un ambiente cálido y acogedor. La entrada al espacio corresponde al primer módulo donde también se encuentra una pequeña cocina, mientras que en el segundo y tercero se encuentran cómodas literas y camas para un máximo de ocho alpinistas.

Con el fin de preservar el medio ambiente, el Alpine Shelter Skuta lleva unos pines a modo de anclajes colocados estratégicamente que provocan un impacto mínimo sobre el terreno.

Este nuevo refugio, de reciente creación, sustituye al antiguo bivouac esloveno y cumple con los desafíos de un clima extremo. Ya sea uno alpinista o no, lo cierto es que viendo las fotos apetece pasar, aunque sea, una noche bajo su techo sin más ruido ni distracción que el que emana de la montaña.