El refugio más delicioso de los Dolomitas.

Estamos en tiempo de nieve y deportes de invierno, tiempo de montaña y de hacer del frío una oportunidad de ocio y placer; ésto, que puede parecer meritorio, especialmente para quienes tienden a huir del frío como de la peste, pero lo cierto es que no hay más que perderse en un refugio de los Dolomitas para descubrir la magia de nieve y la vista imponente de la montaña.

Oberholz Alpine Hut es un moderno refugio de montaña acondicionado como restaurante que dispone además de una terraza para valientes en invierno y de bellas vistas en primavera, cuando la nieve se despide; su ubicación es magnífica no sólo por sus vistas sino porque dispone de conesión directa a las pistas de esquí. Aquí la belleza se empeña en deleitarnos a través de los sentidos: los grandes ventanales nos regalan una imponente vista de 360º de la montaña, de la cocina del restaurante escapan aromas que despiertan nuestro apetito, las notas sápidas de los platos nos dejan con el mejor sabor de boca y la textura de la madera que acondiciona el interior del restaurante nos hace sentir como si estuviésemos en un refugio de montaña; en el interior es el sonido de platos y esquíes el que nos despierta y en el exterior el murmullo intenso de una montaña que parece latir bajo su manto de nieve.

El estudio de arquitectura de Peter Pichler es el responsable del diseño de este nuevo refugio en los Dolomitas; se trata de una estructura que emula a un árbol caído con tres ramas que parecen sobresalir de la montaña, cada una de esas tres ramas mira hacia uno de los tres picos más altos de la zona; tanto el interior como el exterior de este refugio están construídos en madera de modo que tanto por su forma como por los materiales en los que toma forma esta construcción se integra de modo perfecto en el entorno; la planta baja la ocupan tanto la entrada como el bar y el restaurante mientras la planta superior esconde espacios más funcionales y da salida a la terraza.

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