Viajamos a Barcelona para conocer una moderna casa de diseño que combina su espacio con el de un taller y lo hace en un edificio que antes fue un almacén industrial, todavía antes un granero y antes aún un teatro, de ahí su nombre, El Teatro.
Cadaval & Solà-Morales es el estudio de arquitectura que se encargó de la reforma y convirtió lo que era un espacio industrial en dos estudios unidos por una zona central que sirve de entrada a ambos; el edificio mantiene su fachada y aprovecha la gran altura de la nave para crear dos estudios tipo loft con grandes ventanales al jardín que dan todavía mayor amplitud y luminosidad del interior de esta vivienda; como sucede en las casas de dos plantas, la planta baja se reserva para la cocina y zonas comunes mientras las más elevadas acogen los dormitorios y zonas más íntimas de la vivienda.
En el espacio central se puede aparcar incluso un coche, un clásico que encaje a las mil maravillas con esta vivienda que mantiene no sólo la esencia sino la estructura de la nave original, aquel antiguo teatro, y que restaura su estructura para convertirlo en una vivienda moderna, de estilo industrial y muy propia del S.XXI.
La zona del patio no se entiende si ve con los ojos con los que se mira a una terraza o a un jardín porque en este caso el patio es parte del interior de la casa aunque esté al aire libre aunque se haya retirado parte de la cubierta para convertirlo en un patio exterior, ahí se puede no sólo montar una barbacoa sino también desayunar en él o utilizarlo incluso como lugar de trabajo cuando el tiempo así lo permita que, en una ciudad mediterránea como Barcelona, es una buena parte del año.
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