Para muchos el invierno es sinónimo de árboles sin hojas, poco aire libre y ropa pesada. Sin embargo en la medicina oriental el invierno es una estación “yang”, una estación que implica capacidad de resistencia y adaptación, donde uno debe refugiarse en su interior para redirigir su destino. Una oportunidad para crecer y mirar al mundo con otros ojos.
Al igual que hay que casas de verano, La Muna se plantea como una vivienda para disfrutar del invierno. El estudio de arquitectura Oppenheim architects readaptó la antigua vivienda existente y la amplió para adecuarla a las nuevas necesidades.
Situada en el exclusivo entorno de Red Mountain en Aspen, Colorado, la vivienda retoma todos los materiales regionales para su construcción, siendo la madera y la piedra los principales materiales empleados tanto para el exterior como para el interior.
La re-estructuración de la antigua casa se hizo mediante la implementación de distintos elementos individuales: parte de una buhardilla, una piscina, un muro de piedra, paneles de vidrio perimetral para reflejar el entorno, etc.
Todo un conjunto de elementos que, añadido al uso de paneles solares para proporcionar energía y agua caliente, llega a conformar un espacio en consonancia con el lugar donde se implanta, un espacio que conecta con el entorno desde un profundo respeto ecológico.
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