La Strada. Federico Fellini. Mario Gas. Fotografía: Sergio Parra.
Escena

La Strada de Fellini según Mario Gas

Mario Gas dirige en la Abadía una adaptación teatral de La Strada, la película de Fellini que narra la historia de tres personajes enfrentados a un destino implacable.

Mario Gas dirige una adaptación teatral de este film lírico y amargo de Federico Fellini –merecedor del Oscar a la mejor película extranjera en 1954–, que firma Gerard Vázquez. La Strada cuenta la historia de tres personajes que se encuentran en el
camino recién terminada la 2ª Guerra Mundial. Un periodo tan oscuro y miserable como el que le precedió. A través de ellos, cuyo trágico destino es una losa insalvable, la obra habla de todos nosotros, de las dificultades para cambiar, para luchar contra las ideas preestablecidas, los prejuicios y las cadenas que nos retienen en la caverna.

En la Italia de la posguerra, una mujer joven acaba en un circo miserable tras ser vendida por su madre al forzudo Zampanò, un tipo violento que se aprovecha de la delicadeza de la ingenua Gelsomina. El Loco, el tercer elemento de la trama, es otro arquetipo de la marginalidad que precipita los acontecimientos hacia la hecatombe.

Mario Gas lleva a las tablas la versión de Gérard Vázquez, fiel al original del cineasta italiano, no sin ciertos matices muy “gasianos” (imágenes proyectadas, elementos alegóricos como la carreta que acompaña a los cómicos) sobre un escenario casi minimalista. La música de Orestes Gas y el vestuario de Antonio Belart se suman y completan el ambiente despojado de objetos superfluos propios esa especie de road movie teatral soberbiamente interpretada por Verónica Echegui, Alberto Iglesias y Alfonso Lara. Ellos dan vida a los tres protagonistas que intentan sobrevivir en una “sociedad que les oprime constantemente”, intentado salir a flote, buscando arrancarle una sonrisa a la profunda tristeza en la que viven.

Aunque la pieza sigue las pautas de Fellini y recrea el panorama desolador de un país destruido por la guerra, su esencia, su filosofía, encaja a la perfección en nuestros días. “El pensamiento del hombre del siglo XXI está lleno de sombras que tomamos por nuestra realidad, prejuicios que balizan nuestras decisiones, y que son las cadenas que nos atrapan en un espacio pequeño y lóbrego. De esto precisamente trata ‘La Strada”, explica Gas.

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Teatro Abadía. Sala Juan de la Cruz. Del 22 de noviembre al 30 de diciembre, 2018. De martes a viernes, 20.00 h. Sábado, 18:00 h y 21:00 h. Domingo, 19.00 h