Escena

Cinco conciertos para celebrar marzo

Mientras el largo invierno da sus últimos coletazos, el mes de marzo se anuncia musical y clásico a partes iguales.

Sí, por fin marzo ha llegado a nuestras vidas y con él la luz de la primavera. Mientras el largo invierno da sus últimos coletazos, el mes más bonito del año, para algunos —para otros el más deseado—, se anuncia musical hasta el extremo. Como debe ser, por otro lado, para celebrar el cambio de estación (y el de hora) que esperamos desde hace tanto tiempo.

El Festival Internacional de Arte Sacro abre una agenda repleta de música clásica y repertorios poco frecuentes. Cuarenta días dedicados a evocar el misticismo de tradiciones y rituales ancestrales que celebraban el fin de un invierno aciago y el renacer de la luz, los ciclos vitales, las fiestas del equinoccio… En esta su XXVII edición, el festival mantiene el apoyo a las formaciones españolas, a las jóvenes promesas, conservando la altísima calidad en su programación. Tampoco olvida los importantes aniversarios que se conmemoran en 2017, con compositores como Alonso Lobo, Claudio Monteverdi o Georg Philipp Telemann y el arquitecto madrileño Ventura Rodríguez o fechas históricas cruciales como el inicio de la Reforma Protestante en 1517.

Por otro lado, en el Auditorio Nacional crece la popularidad de su ciclo matinal dedicado al gran maestro de Barroco, Bach Vermut. Se trata de una exquisita iniciativa que nació en 2014 para acercar al público la grandeza de Bach interpretada por los mejores organistas internacionales. Eso sí, sin protocolo, ya que mientras suena el colosal órgano del auditorio se sirve un aperitivo, previo a la sesión de jazz que cierra el planazo musical de los sábados por la mañana. Ya lo dijo Beethoven, Nicht Bach, sondern Meer sollte er heissen”. “No debiera llamarse ‘Bach’ (arroyo), sino ‘Meer’ (mar)”.

Al margen de estas propuestas institucionales, salas míticas como la madrileña Galileo Galilei y museos como el Lázaro Galdiano se suman a la fiesta de la música clásica con conciertos únicos y ciclos extraordinarios, alejados en cierto modo de los circuitos tradicionales. Buena prueba de ello son los diferentes formatos musicales de la Fundación Juan March que ofrece representaciones para todos los gustos. Desde los conciertos de los miércoles en torno a una perspectiva histórica, recitales para jóvenes o los viernes temáticos, hasta los conciertos de los sábados que acogen repertorios clásicos, jazz, música antigua… Este mes se desmarca con un programa especial dedicado a un género muy poco explotado, los melodramas.