Saporem: De Madrid, del mundo.

Único. Por dentro y por fuera. No solo porque llama la atención en el Madrid más antiguo, también porque su interior, en cocina y en sala, sorprende. Saporem abarca el mundo en tres espacios y una sola carta, y ya es difícil encontrar mesa.

Un toque colonial por aquí, un rincón provenzal por allá, una pincelada rústica, un trazo industrial y esencia cosmopolita donde las haya, y es que Saporem se encuentra en los bajos de Room 007, un nuevo hostel de lujo por el que se pirra el turisteo más trendy. Requena y Plaza y César Galán son los nombres propios detrás del proyecto. Los primeros, artífices de un marco de excepción para un concepto cien por cien internacional. El segundo, a los fogones, con una carta ideada para compartir y no perder detalle de los sabores ni del entorno.

Esperamos mesa en barra oteando el panorama dando sorbos a un vaso de sangría de cava. Elegimos un rincón íntimo o una mesa para amigos. Sobre ella, rollitos o brochetas de pollo con salsa de pepino y menta o al curry, cogollos de Tudela con queso italiano, naranja y guacamole de plátano, tataki de atún y fresas, kebab de merluza fresca y, para los que no gusten de riesgos, una hamburguesa de solomillo con pan de miel o cualquiera de sus pizzas al horno, cuyo punto de cocción casi puede supervisarse desde el asiento gracias a la cocina vista.

Recetas sencillas, sabores muy de España con guiños a otras culturas. Travesuras en un local que lleva la tendencia por bandera y que promete, sin duda. La compañía perfecta es la de una botella de Moscato y el postre tiene forma de sopa de tiramisú y de tarta de oreo, mascarpone y fresas.

La noche se alarga en una inmensa terraza interior, tesoro de Saporem y punto de encuentro en las primeras horas de la madrugada con música en vivo y la posibilidad de encenderse un cigarrillo mientras se estudian las innumerables propuestas futuras de DJ's, muestras de arte y mercadillos.

Arte, coctelería de lujo, cocina de autor a la carta o en menús asequibles, meriendas con sabor a gin tonic... Sabor, olor y color. Saporem lo es todo. Y mucho más.

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