Llegar a Formentera, ya sea para pasar un día, una semana o una temporada, es hacerlo a uno de los paraísos mediterráneos más bellos de nuestra costa; se trata de la isla balear menos poblada -exceptuando las que no lo están en absoluto- y a ella sólo puedes llegar en barco desde Ibiza o, en la temporada de verano, también desde Denia.
Estamos en una isla cálida y muy llana, con espectaculares costas y playas de las que nunca querrás marcharte; en un entorno así casa hotel es un pequeño tesoro y el Gecko Hotel & Beach Club, que lo sabe y lo siente, se ha renovado para que su belleza y encanto esté a la altura de su isla.
150 metros lineales de playa son testigos de la presencia de este magnífico establecimiento de tan solo 30 habitaciones, todas renovadas este invierno y todas ideales para pasar unos días de verano; y si lo que planeas es una viaje a Ibiza con una imperdible escapada a Formentera, no olvides el Beach Club de este hotel porque ha sido igualmente renovado este invierno desde su interiorismo hasta su carta y un día en él, desde el desayuno hasta la puesta de sol, es lo más parecido a una estancia en un paraíso terrenal.
Con el sol brillando como sólo lo hace en verano y el Mediterráneo frente a ti ¿qué más puedes desear? un desayuno ecológico, una ensalada fresca o un arroz inolvidable, una copa al caer el sol, un poco de Bossa Nova si es jueves o DJ Joao Ribeiro al mando de la música cualquier otro día de la semana, unos espetos si es miércoles o viernes y un cóctel, con o sin alcohol, cualquier día de la semana al caer el sol. Todo ésto y más lo encontrarás en Gecko Beach Club, un punto de encuentro y estancia renovado para enamorarte como sólo te enamorará Formentera.
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