Estrella.
Restaurantes

Cremá de sabores

Cocina mediterránea vanguardista, natural, deliciosa y reconocida en el mundo, era El Poblet, y vuelve a serlo...

Ya con los pies bien plantados en la primavera, el cuerpo nos pide sal... la sal del mar y del sol, la sal de la vida y el mediterráneo. Si ese grito tan íntimo de tu piel en busca de la calidez y el placer te lleva camino a la costa de la cremá, estás de suerte, porque podrás degustar la cocina mediterránea más vanguardista, natural y deliciosa, la de Quique Dacosta y sus tres estrellas michelín.

En Francia le llaman 'el brujo' porque sus creaciones en la cocina rozan el arte y la magia, y porque convierte sus platos en una bella cremá de colores, texturas y sabores a la que rendir el gusto. Dacosta es un chef reputado y admirado y lo es más por quienes lo conocen y saben de su evolución.

Quique Dacosta llegó en su adolescencia a Denia, empezó en la hostelería fregando platos primero y como pinche después, aprendió, creció y evolucionó, el restaurante en el que pidió trabajo como pinche 'El Poblet' es hoy suyo, su 'Quique Dacosta Restaurante' y, en una demostración más de su unión con la tierra en la que se ha convertido en un reputado chef a nivel mundial, en 2012 ha abierto nuevo restaurante en Valencia ¿de nombre? 'El Poblet'.

Sopa fría de hierbas y crustáceos; salmonete de roca con guisantes y eucalipto; foie gras asado y reposado con aloe vera; arroz con anguilas ahumadas, perlas, medias cerezas y flores de Romero; chutney de mango y naranja; iceberg de almendras amargas con nécoras; lomo de mero asado y reposado; lomo de lubina con salsa de pan; chuletón de Denia con vainas de guidsantes y piel de naranja...

Éstos son algunos de los platos históricos de Quique Dacosta que podrás degustar también en El Poblet de Valencia, además de hacerlo en su restaurante estrellado de Denia; cocina del más algo nivel y mejor gusto, técnicas modernas e ideas vanguardistas alrededor de los alimentos de temporada y de primera calidad y sobre una tradición gastronómica incontestable.

Tú sólo siéntante... y degusta.

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