Ocho mesas, veinticinco comensales, junto al paseo que recorre la ría y a la vista del mercado de la Rivera y el puente de San Antón... es una experiencia gastronómica única, la del restaurante Mina. Y es de Bilbao.
La experiencia Mina es su menú degustación que, en versión de 7 o 10 platos, es lo único que encontrarás en la carta del restaurante porque la mezcla y elaboración de los diferentes ingredientes en cada plato y el camino que recorres según pasas del primero a los siguientes, suponen un paseo de sabor y placer sobre la gastronomía vasca con pinceladas de otras.
Claro que el menú degustación no es siempre el mismo, cambia no sólo con las temporadas y los productos que les son propios sino cada día, con lo más fresco y delicioso que ofrece el mercado.
He aquí una muestra de cómo se degusta en Mina: hígado de rape a la diabla, apio y manzana verde; mejillones con tomate picante, sopa de coco y citronela; txangurro, emulsión de yema, soja y pasión; salmonete asado jugo de pimentón, cardos y citronela; pichón, asado pan de especias y miso, café y anguila ahumada; y el postre, por partida doble: merengue de piña, helado de hierba luisa, crema de nata reducida y toffe; y bizcocho de chocolate negro, crema de caramelo quemado granizado de ron viejo y un helado de ajo negro.
Riegan además el menú con lo mejor de una bodega de 150 referencias y un maridaje diario en función de los platos de cada día.
Una gran idea llevada al plato que le vale además al Restaurante Mina su estrella michelín. Te esperan en Bilbao, para que la degustes.
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