Caramba es una de las aperturas más notables de 2017 en Madrid, es también una nueva apuesta del Grupo Larrumba, esta vez en el renovado hotel Regina; y no, no tiene apenas nada que ver con las tradiciones gastronómicas de otros mundos, ni tan siquiera con la cocina creativa, Caramba es un restaurante castizo, también diverso gracias a sus espacios claramente diferenciados y es, sobre todo, un universo muy femme, cuenta incluso con tocadores para retocarte el maquillaje...
Y es que Caramba no se llama así por casualidad sino porque esa era la expresión que exclamaban sorprendidos los clientes habituales de los cafés de Madrid a principios del siglo pasado al ver entrar en ellos alguna mujer, mujeres que no necesitaban abrazarse a banderas de ninguna clase, eran mujeres cultivadas que vestían como les parecía y entraban en los cafés poblados por hombres porque para ellas un 'siempre ha sido así' no significaba más que un 'ahora va a ser diferente' ellas, con sus actos tanto o más que con sus palabras, comenzaron a hacer diferentes los cafés de Madrid.
Caramba ocupa toda la planta baja del hotel Regina e integra la recepción en el bar, el sótano se reserva para los salones y las salas de aseo con sus tocadores; en cuanto al menú y las copas, todo resulta muy tradicional y muy rico, aquí podrás meterte un cocido entre pecho y espalda, una sopa castellana o el guiso del día; croquetas de jamón, tortilla de Betanzos, el clásico bocadillo de calamares o bocados con un toque internacional como el pollo de corral crujiente al estilo japonés; rabo de toro, secreto de cerdo ibérico, tartar de atún rojo, pulpo a la plancha... ¿y una copa? la carta de cócteles no tiene tampoco desperdicio ¿qué te sugieren copas como 'caperucita se hace mayor', 'la vida pirata, la vida mejor', 'bebiendo que es gerundio', 'carpe diem' o 'de Madrid al cielo'? Acércate a Caramba y descubre qué se esconde tras estos sugerentes nombres de cóctel.
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