Si alguien tenía alguna duda acerca cuánto hay de cierto en eso que llaman 'globalización', he aquí una noticia que la explica del modo más dulce y romántico del mundo: hace un buen puñado de años (décadas!) nacía en un pueblo de Japón un niño que a la edad de 15 años se plantó en Tokio y en poco tiempo decidió que lo que quería era ser pastelero; viajó a Europa, se formó en Bélgica, París y Londres, allí conoció a la que sería su amor y la mujer de su vida, una española de Barcelona, ciudad en la que el ya matrimonio se instaló y en la que convirtió en realidad el sueño de aquel niño japonés: regentar su propia pastelería. Hablamos de Takashi Ochiai, de su pastelería japonesa en Barcelona y de su panettone, que sucede al de Paco Torreblanca como el mejor de España.
Takashi Ochiai regenta su pastelería en Barcelona desde 1983, en sus primeros momentos se trataba de un establecimiento centrado en los dulces catalanes pero con el paso del tiempo el intenso y diverso bagaje cultural de Ochiai se fue dejando notar y hoy su pastelería es internacional y en ella puedes degustar desde los míticos dorayakis japoneses hasta el mejor panettone de España. Y no, no es imprescindible que visites Barcelona para darte el gusto de probar su panettone, te lo envían donde tú quieras, eso sí, tendrás que hacerte cargo de los gastos de envío y armarte además de paciencia porque el obrador de Ochiai, si bien da respuesta a la demanda de sus panettones, no lo hace al ritmo que tu ansiedad por probar este rico dulce exige.
Si te pierde el dulce y especialmente los dulces de Navidad, no puedes dejar que se pase del todo lo actual sin probar el panettone de Takashi Ochiai.
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