Se produce en Úbeda, con aceituna 100 % picual y vestido, sin tela pero sí con tinta y papel, con un mantón de Manila. Es el aceite Cortijo Spiritu_Santo.
En el corazón de Jaén, referencia absoluta en la producción de aceite, el matrimonio formado por Juan Molina y María Molero, con larga tradición olivarera, ha creado su joya más preciada. Es un aceite de oliva virgen extra, fruto de las aceitunas obtenidas exclusivamente en sus más de 100 hectáreas de olivares.
En esta primera edición Cortijo Spiritu_Santo se presenta en dos formatos de botellas rectangulares de vidrio transparente de 500 ml y Rústica, esto es una edición especial de 250 ml y 500 ml, con una forma de botella curvilínea y de cristal oscuro. De este modo, no pasa la luz y en la que destaca su etiqueta de flores rojas y rosas que simulan el relieve de un mantón de Manila.
Además, cuentan con un formato familiar de 5 litros, presentado en un cómodo envase de aluminio y cartón, fácilmente almacenable y que tampoco permite que entre el aire ni la luz.
Cortijo Spíritu_Santo utiliza las técnicas más modernas respetando los estándares de calidad de unas aceitunas recogidas entre octubre y noviembre, en un estado de madurez óptimo, cuando las aceitunas presentan en su mayoría un color verde.
De esta forma, se evita que las aceitunas más maduras empiecen a fermentar y alteren el sabor del aceite. Las recogidas al inicio de la campaña mantienen unas características organolépticas muy particulares, entre las que destacan en nariz aromas intensos y complejos, como herbáceos y frutales que recuerdan a la tomatera. En boca, se aprecia un notable equilibrio entre amargo y picante.
La ubicación de la almazara en la propia finca hace posible que el proceso sea mimado de principio a fin. Es decir, desde el cultivo de los olivos, la recolección y el transporte en el mínimo tiempo posible hasta, claro está, el proceso de molturación de la aceituna inferior a 6 horas desde su recolecta, almacenamiento y envasado.
Desde 7€