Un ambiente emocional construido en blancas, negras y silencios. Corcheas y claves que se convierten en burbujas a conciencia. Una estética sofisticada con un post gusto cuidado, conceptual, mágico y auditivo. Así es la edición limitada “Songlines” de Krug Grande Cuvée, creada por el músico y diseñador Sébastien Léon.
El trabajo de Sébastien pone a prueba la dimensión física y el sonido del espacio que lo habita. Mezcla y representa esas sensaciones gráfica y musicalmente; y convierte al arte en un viaje que explora ambos universos. Imágenes mentales que vienen a través de las notas que se van sucediendo. Y los sonidos de esos espacios visuales que genera en sus obras.
Una provocación sensorial y exquisita que simboliza a la perfección al champagne más legendario, el Krug Grande Cuvée. Y la musicalidad que despiertan las notas gustativas de Krug quedan plasmadas en “Songlines” y su estuche único.
Los paisajes casi cósmicos del artista quedan impresos en oro sobre un fondo cereza profundo. Una figuración gráfica basada en las rutas surcadas por los aborígenes australianos, quienes a través de sus canciones encuentran codificados los puntos de referencia donde la naturaleza da lo mejor de sí para su supervivencia. Tradición, cultura y legado.
Una visualización casi hipnótica del mundo natural que Sébastien representa en su obra escultórica y pictórica… además del recorrido musical de los champagnes de Krug.
En la Maison, cada edición se concibe como una pieza artística. El Maestro de Bodega, Eric Lebel, selecciona lo mejor de la naturaleza actuando como un gran director de orquesta que maneja a la perfección las uvas, los sabores y las expresiones de cada uno de los elementos y procesos de cada champagne. La sinfonía de este Krug Grande Cuvée es original, de sabor lírico y emocional.
Por eso, no es de extrañar que la Maison Krug proponga, año a año, un programa de maridaje auditivo a través de artistas excepcionales. Basta con descargar su app (para los sistemas iOS y Android) para potenciar las notas de cata a través de las emociones creadas a través de las diferentes listas de reproducción de artistas como: Keziah Jones y la pianista Khatia Buniatishvili; el artista de jazz Jacky Terrasson, la pianista Marcela Roggeri o la arpista Cecilia Chailly.
Cada año, más de 120 vinos de 10 años diferentes crean una armonía sinfónica que expresa lo mejor de la Maison en su Krug Grande Cuvée, el champagne más original de la Krug.
Galería de imágenes
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Krug Grande Cuvée es original, de sabor lírico y emocional.
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Obra del artista, de la serie Songlines.
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Obra del artista, de la serie Songlines.
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Obra del artista, de la serie Songlines.
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Obra del artista, de la serie Songlines.
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Un estuche en cereza profundo diseñado con la obra del artista impresa en oro.
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Detalle de los caminos cósmicos que describen el recorrido de los aborígenes australianos.
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La Maison Krug tiene un programa de maridaje auditivo a través de artistas excepcionales.
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Una sinfonía de sabores que marida a la perfección con lo más selecto de la gastronomía.
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Una sinfonía de sabores que marida a la perfección con lo más selecto de la gastronomía.
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Una sinfonía de sabores que marida a la perfección con lo más selecto de la gastronomía.
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Una sinfonía de sabores que marida a la perfección con lo más selecto de la gastronomía.
