Envuelto en la máxima discreción posible, el segundo yate privado más grande del mundo, ha regresado al lugar de su construcción, para ser renovado.
Desde la noche del pasado jueves, el "Eclipse", el mega yate de lujo propiedad del multimillonario ruso Roman Abramovich, se encuentra anclado en el puerto de Hamburgo. El "Eclipse" con 162 metros de eslora y valorado en aproximadamente 850 millones de euros fue botado en 2009 por el emblemático astillero alemán Blohm + Voss de Hamburgo.
Con más de cuatro horas de retraso, llegó el jueves por la noche a los muelles del puerto de Hamburgo donde fue construido, el barco del magnate ruso del petróleo y propietario del Club de Futbol británico Chelsea, Roman Abramovich.
No se conoce concretamente, que es lo que va a ser reparado o renovado en el barco del magnate ruso, pero se rumorea que se van a acondicionar algunos de los 36 camarotes. El "Eclipse" es completamente blanco y cuenta con una tripulación de 50 personas. Tiene una piscina y una discoteca a bordo, además de 20 motos de agua, cuatro lanchas de motor, y todo tipo de detalles técnicos.
Abramovich obsesionado con su seguridad y su privacidad, dicen que ordenó incorporar un sistema antimisiles y un láser 'antipaparazzi' que bloquea cualquier tipo de cámara digital que intente capturar cualquier imagen de la embarcación. El Eclipse cuenta también con un pequeño submarino, capaz de trasladar a tres personas para escapar ante cualquier amenaza.
El yate de lujo según testigos presenciales, estuvo esperando varias horas en Brunsbüttel, antes de finalizar su viaje por el río Elba en dirección a la ciudad de Hambuergo, para definitivamente atracar a las 21 horas del jueves en los muelles de Blohm + Voss.
De momento los trabajadores de los astilleros han empezado a drenar el agua para poder trabajar en el casco con los pies secos.