Hay perfumes y cosmética de la que os hablamos de forma habitual, marcas que nos parecen más que interesantes, sorprendentes, únicas e incluso mágicas. Casi todas ellas las usamos en la redacción de loff.it, y con deleite y pasión. Los perfumes por lo que son, la cosmética porque es de la mejor que hemos probado. Perfumería y cosmética nicho, de la que no es fácil encontrar, de la que se vende en pocos lugares, selectos. Pero, ¿os imagináis un lugar que agrupe todos esos perfumes y esa cosmética? Pues la suerte nos acompaña. ABANUC, hasta ahora tienda online y física sólo en Zaragoza, acaba de abrir en el centro de Madrid.
Las deliciosas y siempre sorprendentes notas de los perfumes, de los perfumes sólidos, de los ambientadores y las velas de Diptyque, de todo el órgano de la firma sueca Byredo (con sus perfumes, sus elegantísimos packaging o sus perfumes en polvo) de la que ni podemos ni queremos ni sabemos escapar, de las fragancias para el cuerpo (y para la mente, nos dicen) de Miller et Bertaux, junto con la alta cosmética de las extraordinarias formulas de EVE LOM, de la magnífica cosmética orgánica de Grown Alchemist, o de la austriaca SA.AL&CO, o las naturales de Malin+Goetz, todas con esa calidad y honestidad de quien no tiene que prometer los resultados que saltan a la vista.
Y todo, junto, en un solo espacio que se convierte en una maravilla para los sentidos. Y no cualquier espacio, si no uno singular, por su estructura, por su compleja configuración en tres salas, la intermedia en dos niveles con un atrio con vistas a la última, cuya resolución resulta casi mágica, conservando y reconvirtiendo las librerías originales en expositores llenos de fragancias y experiencias, en lo que los madrileños reconocerán como la antigua librería Marcial Pons de la Plaza de las Salesas. Y por eso, entre los olores y las cremas más interesantes, una genial colección de objetos y sobre todo una estremecedora colección de primeras ediciones de libros que también están a la venta. Ingenio a raudales y una apuesta compleja con final feliz. Más que final feliz, de hecho, magnífico para todos los sentidos y para el regocijo del hedonismo.
Y como colofón, una sala de tratamientos de EVE LOM en la parte de abajo a modo de pequeño, cómodo, cálido, agradable y apacible spa del que se entra con esa piel maltratada del día a día de una ciudad y se sale con la frescura, brillo y lozanía de la primera juventud alpina y con una sensación de gran homenaje "me lo he ganado" y la barbilla no menos de dos centímetros más alta y orgullosa.
Claro que si no estás en Madrid o no quieres esperar a pasar por la capital para vestirte de Byredo, de Diptyque o mejorar tu piel con cualquiera de las marcas de ABANUC siempre puedes recurrir a la tienda online donde podrás encontrar todo lo que necesites de la oferta de cosmética, perfumería, fragancias o aromas, sin gastos de envío y con un paquete de esos que emociona cuando llega y que viene siempre acompañado de algún complemento interesante a descubrir. Aunque la experiencia física, la de poder oler, sentir, experimentar, solo en la Plaza de las Salesas 10 de Madrid.
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