Alessandro Michele, desde la dirección creativa de Gucci, estrena una magnífica colección de aromas que incluye 7 perfumes, 4 aceites perfumados, 3 aguas perfumadas y una vela; para componer este nuevo mundo aromático ha contado con un aliado excepcional, el sevillano Alberto Morillas, cuya nariz es responsable de perfumes tan icónicos como Acqua di Gio de Armani y otros igualmente inolvidables para firmas como Valentino, Bulgari o Marc Jacobs. El jardín del alquimista es el nuevo mundo aromático de Gucci, un mundo en el que las esencias cuentan historias y se mezclan en el aire regalándonos nuevas notas aromáticas.
Los 7 perfumes se presentan en otros tantos frascos de porcelana ricamente decorados y bajo nombres de lo más sugerente y evocador: Una canción para la rosa -con notas de almizcle y rosa-, La voz de la serpiente -con esencias de oud, cuero, azafrán y pachulí-, Los ojos del tigre -con notas de vainilla y tonka-, La violeta virgen -con aromas de almizcle, violeta y vainilla-, Lágrimas de iris -con esencia de flor de iris-, Primavera de invierno -flor de mimosa, pimienta y almizcle- y El último día de verano -cedro y ciprés-.
Las aguas perfumadas se presentan en botellas de vidrio lacadas en blanco, son Fading Automn, A Winter Melody y Moonlight Serenade.
Los frascos que contienen los aceites son también de vidrio lacado aunque no en blanco sino en verde, son éstos: A forgotten rose, Nocturnal Reverie, The Violet Kiss y Ode on melancholy.
La vela contiene también los aromas de este magnífico jardín del alquimista que han construído Alssandro Michele y Alberto Morillas, huele a pétalos de almizcle e iris, también a violeta, y emite una fragancia suave y persistente, inolvidable, deliciosa...
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