Cosmética

Una fiesta en el jardín

Garden Party de Dior, una florida colección de maquillajes cuajados de verdes nenúfar, azules plata y rosas albaricoque.

Qué ganas de primavera tenemos ya ¿no? ¿Las tardes empiezan a ser un poco más largas o es sólo una ilusión? Lo que es ya una realidad es la nueva colección de maquillajes de primavera de Dior, que viene cuajada de colores pastel y texturas ligeras. Su nombre es toda una declaración de intenciones: Garden Party, y ambos, el jardín y la fiesta, existieron de verdad.

Christian Dior pasó su infancia en Granville una localidad de la costa normanda francesa en cuyos acantilados, desafiando los vientos, se erigían hermosas mansiones propiedad de las familias acomodadas de la región. En una de ellas se crió el modisto quien consiguió recrear un hermoso jardín pese a las difíciles condiciones de la zona. Lo más llamativo resultó ser la rosaleda que aún hoy puede admirarse. El triunfo de aquel jardín, toda una proeza, representa el modo de hacer las cosas del francés, su estilo a lo Dior, una inusual mezcla de creatividad, exigencia, imaginación, voluntad… El jardín fue escenario de infinidad de fiestas, “grandes bailes del siglo”, como los bautizó el joven Dior, a los que asistía lo más granado de la sociedad del momento.

En homenaje a aquellas recepciones se lanza esta Garden Party, una completa gama de maquillajes primaverales que encuentran en el verde y en el violeta la máxima expresión de aquel jardín festivo. Pero hay más tonos: albaricoque para conseguir unos labios-beso, azul plata, gris Parma y amarillo botón de oro para los párpados, uñas en verde nenúfar y caricias de luz para la tez. Entre las piezas clave, Dior Garden Clutch (75 euros) un delicioso accesorio digno de coleccionista. Se trata de un bolsito de mano plateado confeccionado a mano en los talleres de joyería de la maison. Con cierre de click en forma de capullos de rosa, se presenta en dos armonías y contiene las sombras y los gloss precisos para darse buen tono en un coqueto gesto.

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