“¡A veces os envidio tanto! Vosotras, las mujeres, tenéis la gran suerte de poder inventar constantemente vuestra feminidad. Me parece increíble poder adoptar un look casi garçonne un día, pop y juvenil al día siguiente y resultar apasionada y seductora al tercer día… ¡Y sin dejar de ser vosotras mismas! He creado esta colección para que cada una puede seguir jugando”.
¿Hace falta más para que te lances? Estas palabras de Olivier Échaudemaison, director creativo de Guerlain, denotan lo mucho que conoce a las mujeres, cuánto las admira y lo bien que ha interpretado lo que nos gusta hacer con el maquillaje: jugar a transformarnos, desorientar a quien nos mira, convertirnos en otras... Así que ¿por qué no confiar en él? Su propuesta para el otoño apuesta por dos colores: el rojo infernal y el rosa cándido. Ya, dos tonos con los que no te atreves ¿verdad? Los dos clásicos de la casa Rouge d’Enfer y Rose Angélique, versionados en una deliciosa colección de matices, te animarán a iniciarte.
Bermellón, cereza, amapola, ladrillo, ciruela, frambuesa… La clave de los rojos y los rosas es la mesura. Ni mucho ni poco, ni todo a la vez. Si los labios van en rojo, el colorete ha de ser rosa femenino o naranja solar. ¿Al revés? Si los labios van en rosa, el colorete rojo: el efecto Glam’Rock (look que se avecina), logradísimo. Si los labios van en beige el colorete siempre rosa. ¿Que te atreves con los labios naranja? Entonces, beige en las mejillas.
Guerlain, que inventó la barra de labios en 1870, firma una de las más bonitas disponibles en el mercado: Rouge G L’Extrait (42 euros) un objeto singular puro diseño que se alarga en esta edición para contener mejor la fórmula, una auténtica crema intensa y de acabado mate. La colección se completa con colorete (Rose Aux Joues Duo de Blush, 45 euros), brillo de labios (Kisskiss Gloss, 28 euros), sombras para los párpados (Écrin 4 Couleurs, 52 euros) y lapicero labial Le Stylo Lèvres, 25 euros).
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