La demanda y consecuentemente los precios de las viviendas en las zonas más caras de Londres han comenzado a caer por primera vez desde la crisis financiera, debido al aumento de los impuestos y a los temores de que el mercado inmobiliario de lujo de la capital haya alcanzado su cenit.
Asimismo la fortaleza de la libra esterlina sumada a las nuevas y estrictas reglas de préstamos hipotecarios introducidas por el gobierno en la primavera pasada, han contribuido a la desaceleración del sector.
Según un exclusivo estudio que realizó para el Financial Times por el proveedor de datos LonRes. Los precios de las viviendas de gama alta en Londres durante el segundo trimestre de 2015, cayeron por primera vez desde 2009. Las propiedades de lujo en pleno centro de Londres cayeron un 0,9 por ciento en el primer semestre del año. Una enorme desaceleración con respecto al mismo periodo del año anterior, en el que los precios aumentaron un 15 por ciento.
Durante los últimos tres años el canciller del Tesoro británico George Osborne, ha estado imponiendo nuevos impuestos a los propietarios extranjeros de inmuebles a la vez que aumentaba los ya existentes. El pasado mes de diciembre los agentes inmobiliarios britanicos se quejaron ante las autoridades de estar ahuyentando a los compradores adinerados y están advirtiendo a los vendedores de inmuebles a reducir sus expectativas con los posibles compradores, asegurando que las expectativas de los vendedores no son realistas.
Los compradores nacionales de viviendas que necesitan pedir prestamos se han visto particularmente afectados por las estrictas reglas de préstamos hipotecarios presentadas por el Gobierno el año pasado y les resulta complicado poder competir con los inversores que cuentan con dinero en efectivo, otro factor que les empuja a buscar viviendas en mercados más baratos.