La aplicación ‘Make Up Genius’ de la compañía de cosméticos francesa L'Oréal triunfa en China con 4,7 millones de descargas. La app disponible para iOS y Android permite probar los productos de L'Oréal utilizando los móviles o tablets como un espejo virtual y ha conseguido un total de 14 millones de descargas en todo el mundo.
La app fue lanzada en 2014 en Paris y se expandió rápidamente por toda Europa, Estados Unidos y Asia. En China donde existen 668 millones de personas conectadas a internet ha sido un completo éxito, sobre todo porque a las jóvenes chinas les interesa experimentar con el maquillaje.
Asmita Dubey, directora de marketing de L'Oréal en China señala que no existe una tradición de pasarse trucos o consejos de belleza y maquillaje de madres a hijas, así que la nueva generación de chinas disfruta probando nuevos looks a través de experiencias virtuales.
Makeup Genius, es una aplicación gratuita de L'Oréal Paris que utiliza un complejo logaritmo que escanea en un segundo rasgos, color y textura de la piel y las condiciones de luz ambiental. Inmediatamente después se despliega un muestrario de sombras, lápices de ojos y barras de labios y hay que seleccionar aceptar para verse completamente maquillado en el dispositivo/espejo de la aplicación.
Se pueden hacer capturas de pantalla, compartirlas en las redes sociales y comprar los productos. Igor Capracci, director general de L'Oréal Paris en España, aseguró en su momento que la tecnología de Makeup Genius pretendía dar respuesta a la cultura de la inmediatez.
Makeup Genius ha sido desarrollada en la ‘Connected Beauty Incubator’, una incubadora empresarial fundada dentro del departamento de I+D+i de L'Oréal para adaptar los adelantos tecnológicos al mercado de la belleza. Su director de proyectos, Florent Vaceschini, ha definido la aplicación como "un motor de cosmética virtual", para el que han contado con la experiencia en reconocimiento y seguimiento facial de la compañía Image Metrics que participó en los efectos especiales de la película El curioso caso de Benjamin Button o en el videojuego Grand Theft Auto.