Las marcas italianas del lujo desafían a la recesión económica del país y registran en 2014, una facturación total de 12.400 millones de euros.
Según el último informe realizado por la consultora italiana Studio Pambianco, algunos de los grandes nombres de la moda en Italia, entre ellos el Grupo Ferragamo, presente en 26 países; Tods, la empresa de calzado de la familia Della Valle, Brunello Cucinelli, el rey italiano del Cachemire y de la responsabilidad social corporativa y Luxottica, líder mundial del sector de las gafas de sol y graduadas, registraron en los primeros nueve meses de 2014 un aumento de leve a sustancial de sus ventas en todo el mundo.
Studio Pambianco consultora especializada en investigación de mercados y consultoría de moda y marcas de lujo con sede en Milán, señala que las 11 principales empresas italianas de la industria del lujo, han publicado un volumen de negocios total de 12.400 millones de euros en los primeros nueve meses de 2014, un aumento del 1,5% con respecto al mismo período en 2013.
Alessio Candi, de Studio Pambianco, señala que estas marcas de lujo han sabido capear la crisis económica italiana mejor que otras.
Los beneficios antes de impuestos para las principales las marcas de lujo italianas alcanzaron los 2.600 millones en los nueve primeros meses de 2014, un 21,4% mas que en 2013. Luxottica, líder mundial en la producción y distribución de gafas, registró ingresos de casi 5.800 millones de euros (+ 2,1%) y Salvatore Ferragamo alcanzó un récord de 957 millones de euros (+ 4,6%).
El estudio señala que los beneficios de las casas de moda se mantuvieron fuertes a pesar de las protestas en Hong Kong, mientras que los ingresos de Brunello Cucinelli aumentaron un 10,2% a 277 millones de euros.
La facturación de Prada durante los tres primeros trimestres de 2014 cayó ligeramente (- 0,9%), pero, aún así, el gigante mundial de la moda registró ingresos por un total de 2.500 millones de euros.