Entre las 16.000 empresas dedicadas a la gestión y asesoría de fondos financieros que hay listadas en los Estados Unidos, hay cinco que, de acuerdo con las publicaciones especializadas, destacan por su valor y su tamaño. Los resultados tan positivos no siempre se deben a los mismos factores, pero, sin duda, se trata de las mejores del país, un lujo para los clientes.
Estas empresas son Vanguard, PIMCO, Capital Group Co., J.P Morgan Asset Management y Fidelity Investments. De ellas, las cuatro primeras, a estas alturas del año 2015, gestionan más de un trillón (americano) de dólares. Fidelity gestiona una cifra muy cercana, 920 billones (americanos) de dólares. Un volumen asombroso en unos años difíciles por la incertidumbre de los mercados debido a los coletazos de la crisis, la ralentización de la economía China, la competencia comercial europea por la caída del euro, y los problemas de los países europeos y emergentes.
Lo más relevante de este grupo de empresas sobresalientes es su heterogeneidad. Por ejemplo, JP Morgan cuenta con una tradición centenaria. Fundada en 1871 por el patriarca del imperio, es una de las empresas financieras más grandes del mundo y entre sus clientes están otras empresas y asesorías financieras y gobiernos de todo el mundo.
A su lado, Capital Group es una empresa sin una marca y un prestigio tan reconocidos, que ha ido creciendo en silencio, gracias a la diversificación de servicios. PIMCO (Pacific Investment Management Company) es conocida en todo el mundo. No es extraño, con sus oficinas en 13 países, y su exhaustiva oferta de productos financieros en los que invertir. Fundada en 1972 y adquirida por el grupo aleman Allianz, opera de manera absolutamente autónoma. Fidelity Investments, a pesar de no alcanzar el trillón (americano) de dólares, se caracteriza por ser la mejor puntuada en términos de satisfacción del cliente.
Pero la revelación del año, por ser la que gestiona más fondos, es Vanguard. ¿El secreto? Ha sabido sacar más partido de internet, y es conocida como la gestora "low cost" por ser la que cobra menos y retorna al cliente una mayor parte del rendimiento de su inversión.
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