Pandora, la exitosa empresa noruega de joyería, famosa por sus juveniles brazaletes de plata con amuletos de pedrería, ha cerrado el año 2014 con unas estupendas cifras que reflejan la expansión mundial de su actividad.
El incremento de beneficios por zonas geográficas corresponde a la región de Asia Pacífico, donde ha aumentado un 53,5%, seguido de Europa, donde el beneficio aumentó en el 2014 un 41,1% y por Estados Unidos, donde lo hizo un 19,3%.
El valor de las acciones de Pandora se elevó un 16%, revelando un aumento del 32,5% en los ingresos del grupo y un aumento del 39,5% en su beneficio neto. La compañía ha expresado su intención de aumentar el dividendo anual de accionistas en un 38%.
Curiosamente, el artífice de estos resultados está a punto de abandonar su puesto de C.E.O. Allan Leighton, el ex ejecutivo de Asda que se baraja como nuevo presidente de la enpresa Co-operative Group, ha aceptado un 34,3 millones de coronas danesas (3,4 millones de libras) de Pandora, donde renunciará como presidente ejecutivo próximamente.
El pago en efectivo y las acciones de compensación, tal y como está explicado en el informe anual de Pandora, es equivalente a más de tres veces su salario anual del año pasado. Leighton, quien era el director ejecutivo hace menos de dos años, permanecerá a bordo de la compañía danesa como co-presidente adjunto.
Para el año 2015, la empresa pretende continuar su política expansiva, abriendo el mercado japonés, sin dejar de asegurar al consumidor los mejores materiales (principalmente plata, oro, diamantes, perlas y piedras semipreciosas) y el mejor acabado. Este compromiso es debido a las facilidades que le proporciona que su centro de fabricación esté establecido en Tailandia, donde gozan de ventajas empresariales. En 2014, se fabricaron 91 millones de piezas de joyería, contratando para ello más de 3.100 nuevos empleados. Así, del total de 11.400 trabajadores, aproximadamente 7.900 se encuentran en las instalaciones en Tailandia.