Las ventas de las marcas de lujo en la provincia septentrional china de Shanxi sufren los efectos de la gran campaña contra la corrupción, que a puesto en marcha el gobierno chino.
En el bullicioso distrito comercial del centro de Taiyaun, capital de Shanxi, donde las marcas de lujo como Louis Vuitton, Gucci, Dolce & Gabbana y Hermès han abierto tiendas, las ventas están experimentando fuertes descensos.
Los funcionarios chinos están siendo muy cautelosos en la provincia de Shanxi, rica en carbón, donde el año pasado, más de 15.000 mandos del partido y funcionarios del gobierno fueron investigados por violación disciplinaria. En China, se acostumbra a regalar de relojes caros, bolsos o ropa a cambio de favores empresariales.
"En el pasado, vestir con las mejores marcas en el lugar de trabajo era objeto de admiración, ahora despierta sospechas de corrupción; por lo que en la actualidad todo el mundo intenta mantener un perfil bajo y discreto", asegura un funcionario del gobierno local.
En 2013, Yang Dacai, ex jefe de la administración de seguridad laboral en la provincia de Shaanxi fue condenado a 14 años de prisión, tras declararse culpable de aceptar sobornos y de ser propietario de una gran cantidad de bienes imposibles de justificar.
El caso de corrupción de Dacai saltó a la luz, después de que usuarios de Internet encontraran fotos del funcionario llevando diferente marcas de relojes caros.
El gerente de ventas de uno de los centros comerciales en el centro de Taiyuan señala que las ventas de reconocidas marcas internacionales han disminuido durante los dos primeros meses de 2015. Los artículos para hombres han registrado descensos de ventas del 30 por ciento este año y en algunos incluso un 50%.
Según Guo Xinping, profesor de sociología en la Universidad de Shanxi, la campaña contra la corrupción va a representar un verdadero cambio para la provincia. “La industria del lujo en China no se va a derrumbar, pero su crecimiento se va a moderar, después de años de un crecimiento insostenible impulsado por la corrupción y los sobornos”.