El Grupo Kering crece y cierra un año, el 2016, que marca un punto de inflexión muy positivo en su historia reciente porque de desde 2012 el grupo italiano no había rubricado unos resultados tan incontestables como los que presenta como cierre de 2016.
El crecimiento del grupo alcanza el 6,9 % y cierra el año con unos ingresos de 12.385 millones de euros pero además las firmas del lujo -que representan entorno a dos tercios del grupo- lo hace casi un punto más y alcanza el 7,7%.
Si bajamos al detalle de las principales firmas del lujo que forman parte del grupo Kering, veremos que Gucci, cuya facturación equivale a entorno a un tercio del grupo, marca un 12,7% de crecimiento y Saint Laurent nada menos que un 25,5%; Puma por su parte supera ligeramente el 10% de crecimiento respecto al año anterior. Bottega Veneta, otra de las firmas del lujo importantes del grupo, pone la cruz y sigue mostrando un resultado negativo y cierra el año con 1.173 millones de ingresos, un 8,7% peor que el pasado año.
El resto de firmas del lujo del grupo, que suman juntas unos ingresos de 1698 millones de euros, caen ligeramente respecto al año anterior, aunque únicamente un 0.6%, las firmas incluidas en este grupo son Alexander McQueen, Balenciaga, Boucheron, Brioni, Pomellato, Dodo, Stella McCartney, Ulysse Nardin e Girard-Perregaux. El leve decrecimiento de este grupo de firmas se concentra en los relojes porque tanto la moda como la joyería muestra también buenos resultados con crecimientos que superan el 4%.
Gucci, con Alessandro Michele a la cabeza, marca la recuperación de Kering después de una travesía difícil haciendo frente a una crisis global que amenazaba con llevarse la firma por delante, actualmente la recuperación parece consolidada y los resultados futuros de Gucci, y con esos los de Kering, parecen asegurados.