Según datos de la International Organisation of Vine and Wine (Organización Internacional de la Viña y el Vino) con sede en Paris, China ha superado en 2014 a Francia y se ha convertido en la segunda mayor zona vitivinícola del mundo.
El gigante asiático ha emergido en pocos años como un jugador importante en el sector vitivinícola, habiendo aumentado el territorio dedicado a los viñedos del 4% en 2000 al 11% el año pasado.
Según cifras dadas a conocer el pasado lunes por la International Organisation of Vine and Wine (Organización Internacional de la Viña y el Vino), en China se encuentra la segunda mayor región vinícola del mundo por extensión después de España, quedando Francia relegada a tercer lugar.
En 2014 China dedicó 799.000 hectáreas de tierra a la viticultura, en comparación con las 1.020.000 hectáreas de España.
China, ahora cuenta con más terreno con viñedos dedicados a la producción de vinos que Francia, pero Francia se ha situado por delante de Italia para recuperar su posición como 1º productor mundial de vino.
En los últimos 15 años el gusto por el vino ha crecido de manera muy rápida en China, que se ha convertido en el sexto mayor importador mundial de vino junto con Rusia.
Según la consultora de vinos y licores IWSR, con sede en Londres, China es el cuarto mayor consumidor mundial de vino tinto, y el quinto mayor consumidor global.
Francia continúa siendo el mayor productor mundial de vino registrando una producción de 47 millones de hectolitros el año pasado. La mayor parte de las ventas de vino francés se realizaron en el extranjero, y recaudaron más de 7,700 millones de euros.
Los mayores importadores mundiales de vino en 2014 fueron Alemania, el Reino Unido y los Estados Unidos. Las ventas globales de vino en 2014 aumentaron un 2.6% situándose en 26.000 millones de euros.
Los Estados Unidos son los mayores consumidores de vino del mundo, alcanzando los 31.000 hectolitros, el 13% de la ingesta mundial, seguidos por Francia e Italia. El consumo de vino en China se redujo en 2014 hasta los 15,8 millones de hectolitros, y el 80% del vino consumido fue producido localmente, según la Organisation of Vine and Wine.