Un nuevo estudio de Exane, compañía de inversión con sede en Francia, analiza las marcas de lujo que han logrado el mejor equilibrio entre exclusividad y demanda en China. Chanel se posiciona como la preferida por las mujeres chinas.
Exane, ha realizado un análisis cuantitativo de las verdaderas aspiraciones y deseos del comprador chino cuando se trata de adquirir artículos de lujo. El informe confirma algo ya conocido, como que los incondicionales del mundo del lujo como Chanel, Dior o Hermès son las marcas preferidas por los compradores chinos. No extraña que Apple se uniera a Hermès para fabricar las exclusivas correas de cuero para los relojes de su Apple Watch Edition.
Exane se asoció con la compañía especializada en encuestas de marketing Promise Consulting para elaborar su informe titulado ‘Measuring Brand Exclusivity and Desirability – China’, (Medición de la Exclusividad y Atractivo de las Marcas en China), que calcula la diferencia entre la cantidad de consumidores que desean una marca frente a la exclusividad que ellos ven en ella.
Encuestaron a 607 mujeres chinas entre 18 y 54 años de edad, cuyos ingresos mensuales son superiores a 20.000 renminbi (3.124 dólares). Se les pidió a cada una de ellas que clasificaran alrededor de 30 marcas en términos de exclusividad.
Chanel ocupa el primer puesto en atractivo para los chinos seguida de Hermès, Prada, Louis Vuitton, y Dior. Pero lo realmente revelador del informe de Exane son aquellas marcas que ya tienen notoriedad en China, pero que aún tienen que demostrar a los consumidores que vale la pena invertir en ellas.
El informe señala que marcas como Bottega Veneta, Ferragamo o Prada lograron posicionarse en primeras posiciones en cuanto a atractivo, pese a lo que el consenso del mercado podría sugerir. Mientras que marcas como Gucci y Burberry, si bien se encuentran en posiciones altas, no resultan tan atractivas como uno pensaría. Exane destaca un déficit de atractivo significativo en ambas marcas.
La gran mayoría de marcas de lujo generalmente son cautelosas a la hora de poner a la venta sus artículos en plataformas de comercio electrónico chinas, debido a la gran cantidad de productos falsificados. Burberry fue la primera en abrir el año pasado una tienda en el Tmall de Alibaba, para así comenzar a crear legitimidad en torno a su marca en la plataforma china. Gucci asimismo ha estado trabajando en la reconstrucción de su nombre, no sólo en China, sino también en todo el mundo.
El informe de Exane expone que debido a que las tendencias de los consumidores chinos determinan el destino de las principales marcas de lujo, aquellas que logren acercarse a la creciente clase media china mediante la originalidad y las estrategias de marca van a sobresalir. Hermès por ejemplo hizo bien al elegir posicionarse en Shanghai; un movimiento que confirmo a los consumidores su tendencia por un "lujo refinado", según Philippe Jourdan, director general de Promise Consulting.
"La imagen de marca de Hermès y la concepción de sus productos encuentran eco entre los clientes chinos en constante evolución, que buscan artículos menos llamativos y marcas más discretas, que reflejen un auténtico savoir-faire y que sean de una calidad superior", asevera Jourdan.